El maltrato animal está de nuevo en el punto de mira tras la aparición en el fondo del Barranco del Río, que separa los municipios de Arico y Granadilla de Abona, de decenas de cadáveres de perros de distintas razas.

Colectivos de protección animal han denunciado que en uno de los puentes sobre el lugar se están lanzando a los canes desde unos 60 metros de altura.

Así, dos activictas que descendieron haciendo rápel a esta zona de difícil acceso comprobaron con horror que el terreno estaba lleno de esqueletos y bolsas con restos de perros, algunos de razas peligrosas.

Fue una vecina la que alertó del fatal hallazgo y al bajar los activistas también vieron que los perros habían sido tirados recientemente porque los canes todavía “estaban con el pelo”.

Sobre este asunto se ha pronunciado María (nombre ficticio), que ha calificado de “atroz” la imagen que pudieron percibir sus compañeros.

“Se sorprendieron solo de ver el estado de muchos de los perros con los muslos atados con cuerdas”, ha subrayado.

Además, ha explicado que las dos personas que bajaron contaban con un lector de chips y sospechan que muchos de los de los animales que los tenían podrían ser robados y empleados para peleas, o que alguien “se quiere deshacer de ellos por algún motivo”.

En abril de 2020 ya interpusieron una denuncia al Seprona y en ese momento se rescataron 12 cadáveres. Esta vez han vuelto a acudir a la Guardia Civil. Esperan que se haga eco la sociedad de estas informaciones y la presión social logre que se haga algo más; y también que "las personas que comenten estos actos, no se sientas impunes y que sepan que están controlados".