La razón por la que el agua de Zuera ha dejado de ser potable: qué son los cloratos y cuánto durará la alerta
Una incidencia en el proceso de desinfección ha elevado los niveles de esta sustancia en el agua de la red, obligando a tomar medidas preventivas

Agua no apta para el consumo humano en la localidad de Zuera
Zaragoza - Publicado el
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Desde el pasado 18 de octubre, los vecinos de varias calles de Zuera (Zaragoza) no pueden utilizar el agua del grifo ni para beber ni para cocinar. El motivo es la detección de niveles de cloratos por encima de los valores permitidos para el consumo humano. Aunque el suministro se mantiene para usos de higiene y limpieza, la situación ha generado preocupación y ha reabierto el debate sobre los controles en el suministro.
¿Qué son los cloratos y por qué han aparecido?
Para entender la situación, el químico e ingeniero Daniel Herrero, creador del 'Podcast del Agua', explica que los cloratos "son sustancias que pueden formarse en el agua cuando se usan desinfectantes como el hipoclorito", comúnmente conocido como lejía y esencial para potabilizar el agua. Según el experto, todo apunta a que en Zuera "ha habido una circunstancia puntual relacionada con el proceso de desinfección", como un desajuste en la dosificación o un almacenamiento incorrecto del desinfectante, lo que ha provocado este incremento temporal.
¿Qué riesgos tienen para la salud?
Los cloratos suelen estar presentes en niveles muy bajos que no suponen un problema. El riesgo, según Herrero, aparece únicamente "cuando esos niveles se mantienen elevados durante un tiempo prolongado". En esas circunstancias, podrían afectar a la función de la tiroides o a la capacidad de la sangre para transportar oxígeno. Estos efectos afectarían principalmente a los grupos más vulnerables, como niños pequeños, mujeres embarazadas o personas mayores.
Esta medida es puramente preventiva, antes de que pueda suponer un riesgo real”
Aun así, las autoridades y los expertos insisten en que la medida actual es "puramente preventiva, antes de que pueda suponer un riesgo real". Por ello, se puede seguir usando el agua con total tranquilidad para la higiene personal, la limpieza del hogar e incluso para cepillarse los dientes, ya que la exposición en estos casos es mínima y no representa un peligro para la salud. La recomendación se limita estrictamente a no ingerirla.
Recomendaciones y plazos
Este tipo de alertas suelen resolverse en un periodo corto de tiempo, habitualmente "entre unos pocos días y, como mucho, un par de semanas", a la espera de los resultados de las nuevas analíticas que ya se están realizando. Una vez los técnicos confirmen que los valores han vuelto a la normalidad, el agua será declarada de nuevo apta para el consumo.
Mientras tanto, la recomendación principal es utilizar agua embotellada o de fuentes alternativas para beber y cocinar. Como ha aclarado Herrero, se trata de "una medida temporal por prudencia" y lo razonable es pensar que la situación se normalizará pronto. Lo más importante es que el problema está bajo control técnico y el restablecimiento del servicio es solo cuestión de tiempo.
Este contenido ha sido creado por el equipo editorial con la asistencia de herramientas de IA.

 
                             
                 
                         
                    



