La peste porcina amenaza el liderazgo exportador de España: "Es el 40% de la producción ganadera nacional"

Un foco de peste porcina africana (PPA) detectado en jabalíes salvajes en la provincia de Barcelona ha activado todas las alarmas en el sector porcino español. Aunque la enfermedad no afecta al ser humano, las consecuencias económicas podrían ser devastadoras para una industria de la que dependen más de 430.000 puestos de trabajo. Las autoridades han reaccionado con rapidez para encapsular y erradicar el foco, que por ahora no ha entrado en ninguna explotación ganadera.

Un gigante exportador en riesgo

El sector porcino es un pilar estratégico para la economía española. España es el primer exportador de porcino a nivel europeo y el segundo a nivel mundial, solo por detrás de Estados Unidos. Las exportaciones superan los 8.500 millones de euros y llegan a 116 países. Tal y como explica el agrarista, Fran Aísa, "es el 40 por 100 de la producción ganadera a nivel nacional". En comunidades como Aragón, su facturación supera a la de la industria del automóvil.

Las exportaciones superan los 8.500 millones de euros y llegan a 116 países"

Fran Aísa, agrarista

La clave de la regionalización

La gestión de la crisis pasa por la regionalización, un acuerdo que permite seguir exportando desde las zonas libres de la enfermedad. China, que importa carne de cerdo española por valor de 1.100 millones de euros, ha aceptado este principio y solo prohíbe las importaciones de la provincia de Barcelona. Sin embargo, otros mercados importantes como Japón, México o Taiwán han cerrado sus fronteras a todo el producto español, lo que ya provoca una caída de precios. "Que no se nos caiga el mercado chino, porque entonces sí que tendremos un problema", advierte.

Respuesta rápida y superpoblación de jabalíes

A diferencia de Alemania o Italia, que reaccionaron tarde a sus crisis, la respuesta en España ha sido inmediata. El Ministerio de Agricultura, las comunidades autónomas y el sector han actuado de forma coordinada. Las granjas españolas cuentan con excelentes condiciones de bioseguridad y no se ha detectado ningún caso en ellas. El foco, insisten, se limita a los animales salvajes.

El origen del brote apunta a la superpoblación de jabalíes, un problema que se arrastra desde hace años. Una de las hipótesis es que los animales hayan contraído la enfermedad al comer de los contenedores de basura en los municipios. "Uno de los focos puede ser que los jabalíes hayan comido residuos en los contenedores", señala. Este incidente ha reabierto el debate sobre la necesidad de un control equilibrado de la fauna salvaje y de la actividad cinegética.