Salud refuerza el plan de acción contra el virus del Nilo en el Bajo Guadalquivir pese a no haber casos humanos este año
La Consejería activa tratamientos intensivos ante la alta densidad de mosquitos en municipios como Coria, Las Pueblas o Los Palacios. La situación es mejor que en 2024, pero se quiere anticipar para frenar la proliferación en dos semanas

Manuel Fernández, director general de Salud Pública, explica el plan intensivo contra el virus del Nilo en Sevilla.
Sevilla - Publicado el - Actualizado
2 min lectura
La Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía ha reunido esta semana la mesa técnica provincial para analizar la situación del virus del Nilo Occidental en Sevilla, con el objetivo de reforzar las medidas de prevención en varios municipios del Bajo Guadalquivir, donde se ha detectado una alta densidad de mosquitos adultos. Aunque hasta el momento no se ha registrado ningún caso humano en lo que va de 2025, la Junta ha querido adelantarse para evitar riesgos, especialmente teniendo en cuenta que en las mismas fechas del año pasado ya se contabilizaban 56 casos confirmados.
El director general de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, Manuel Fernández, ha explicado que esta convocatoria responde a dos motivos principales: por un lado, la presencia confirmada del virus en mosquitos en el municipio de Castilblanco de los Arroyos, declarado recientemente área en alerta; y por otro, el aumento significativo de mosquitos en otros puntos de la comarca del Bajo Guadalquivir, como La Puebla del Río, Coria del Río, Los Palacios y Villafranca, Almensilla, Palomares del Río y Bollullos de la Mitación.
Durante la reunión se ha activado un plan de acción intensivo que incluye la aplicación de tratamientos adulticidas tanto en el interior de los núcleos urbanos —parques, fuentes y otros espacios con acumulación de humedad— como en un perímetro de hasta 1,5 kilómetros alrededor de estas zonas. La actuación será ejecutada de manera coordinada entre los ayuntamientos implicados, la Diputación de Sevilla, los productores arroceros de la comarca, la Estación Biológica de Doñana y la propia Consejería de Salud, que movilizará también a profesionales sanitarios e inspectores de Salud Pública para apoyar a los municipios en la toma de decisiones y el desarrollo de medidas.
El objetivo inmediato, según ha señalado Fernández, es lograr una reducción significativa de la población de mosquitos adultos en un plazo de dos semanas. Además, se ha pedido a los consistorios que intensifiquen la vigilancia de focos larvarios con revisiones semanales, especialmente durante el mes de agosto, incluso en aquellos municipios que no presentan por ahora niveles críticos.
En paralelo, algunos municipios han emitido ya comunicados oficiales para informar a la ciudadanía y reforzar el mensaje de tranquilidad. Es el caso de alcaldes como José Manuel Carballar, que ha explicado públicamente que, pese a la detección de mosquitos positivos en trampas del entorno, no se ha dado ningún caso en personas ni en animales. En su mensaje, ha recordado medidas de prevención sencillas como el uso de repelentes, la eliminación de aguas estancadas o la colocación de mosquiteras, incidiendo en la importancia de mantener la calma y seguir con las precauciones habituales.
Desde la Junta, insisten en que la situación actual es mejor que la del año anterior, pero subrayan que no se puede bajar la guardia y que este esfuerzo conjunto servirá para minimizar riesgos en una zona históricamente sensible al virus del Nilo Occidental.



