El misterio del 'guarrito': la palabra que solo los malagueños entienden
En Málaga, pedir un guarrito no tiene nada que ver con los animales, sino con la vida cotidiana y el ingenio popular

Escucha la explicación del profesor Carriscondo en COPE Málaga
Málaga - Publicado el
3 min lectura
Para los malagueños, guarrito no tiene nada que ver con el mundo animal. No, no es un cerdito pequeño. Cuando en Málaga alguien dice "pásame el guarrito", lo que busca no es un cerdito, sino el taladro eléctrico para colgar un cuadro o montar un mueble. Pero, ¿de dónde sale exactamente esa palabra? ¿Por qué solo se entiende en Málaga?
La teoría más extendida dice que el taladro se llama guarrito porque existía una marca de taladros llamada Warrington
Catedrático de Lengua Española en la UMA
Sobre estas cuestiones reflexiona, en COPE Málaga, el profesor Francisco Carriscondo, doctor en Filología Hispánica y catedrático de Lengua Española en la Universidad de Málaga, que explica todo lo que hay detrás de uno de los vocablos más característicos y queridos por los malagueños. Historias de bares, marcas inglesas y adaptaciones populares son algunas de las curiosidades que hay en torno a este malagueñismo.

El taladro eléctrico es conocido en Málaga como el guarrito
Un término lleno de misterio
El profesor Carrizcondo comienza reconociendo que la procedencia de guarrito sigue siendo un pequeño misterio lingüístico que ha dado pie a múltiples teorías. "La palabra guarrito es uno de los enigmas de los malagueños, porque hay muchas teorías sobre el origen. Hay quien dice que al taladro se le llama guarrito por el polvo que deja luego en el suelo. Es un poquito guarra la herramienta", comenta.
te puede interesar
La idea de que el nombre derive del polvo que levanta el taladro no deja de tener sentido, sin embargo, el profesor se inclina por una explicación con acento extranjero y con una creencia mucho más popular: "La teoría más extendida dice que el taladro se llama guarrito porque antiguamente, años 50, 60, 70, existía una marca de taladros llamada Warrington. Aquí entraríamos ya en el fascinante mundo de las adaptaciones de los malagueños de los términos ingleses al español", cuenta.
En Málaga, la tendencia a españolizar con gracia palabras extranjeras ha sido una constante. "De Warrington, que sería la marca del taladro, tendríamos lógicamente en malagueño la palabra guarrito. De Warrington ha derivado a guarrito", afirma.
NO SE HA TERMINADO DE CONFIRMAR
A pesar de la solidez de la teoría inglesa, el profesor Francisco Carrizcondo reconoce en los micrófonos de COPE Málaga que todavía no ha podido confirmar la existencia real de esa famosa marca de taladros. “La verdad que me causa perplejidad, porque te confieso que yo no he visto nunca en Internet ni en anticuarios un taladro de la marca Warrington. Yo creo que ahí hay una leyenda urbana que, bueno, todavía hay que descifrar”, destaca.
Y es que además de eso, tampoco los grandes diccionarios de la lengua recogen el término, algo habitual en los localismos. "Es que tampoco aparece en ningún diccionario. El único diccionario donde aparece es un vocabulario que es muy conocido por los malagueños, el Vocabulario popular malagueño de Juan Cepas, y lo único que dice es ‘guarrito, taladro eléctrico’. No da más explicaciones", explica.
Un guarrito... y tres significados
Pero la historia no acaba ahí. La palabra tiene, según explica el profesor, una sorprendente variedad de usos dentro del habla malagueña. "El uso más famoso de guarrito, aparte del de taladro, es ese que era el montadito de lomo de toda la vida. Hace años había varios bares por Málaga que, cuando tú ibas al bar y pedías un guarrito, te ponían un montadito de lomo de cerdo", asegura.
Además, también se ha documentado su uso para designar las tiras de papel que se colocaban entre las pasas o las uvas. "En el vocabulario popular de Juan Cepas, habla del guarrito como esas tiras de papel que se ponen en las cajas entre las pasas, las uvas... Digamos que ahí también podría tener un sentido porque había un famoso papel de la marca Guarro", comenta. Tres significados distintos -taladro, montadito y tira de papel- para una misma palabra.
UN CLARO MALAGUEÑISMO
Al contrario que ocurre con otras palabras que en principio pueden sonar a malagueñismos pero que no lo son, como ocurre con la palabra espeto, la palabra guarrito sí lo es. "Bueno, pues mi apuesta claramente es que sí, que es un malagueñismo", concluye con esa contundencia el profesor Carrizcondo.




