A más de 3.000 metros de altura: La sangre fría de los agentes de la Guardia Civil que rescatan a tres montañeros en Sierra Nevada

La Guardia Civil ha rescatado a dos hombres de 25 y 50 años y a una mujer de 51 que sufrieron un accidente cuando practicaban alpinismo por un corredor de las inmediaciones de la zona de 'El Goterón', en el pico de la Alcazaba, en el término municipal de Trevélez (Granada).

Fue sobre las 14:50 horas de ayer miércoles cuando los agentes del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de la Guardia Civil de Granada recibieron un aviso del 112 alertando de que un montañero que estaba en una pared hacia el norte de la Alcazaba había resbalado y tenía problemas para continuar la actividad junto con sus otros dos compañeros.

Durante la subida por una zona de corredor del mencionado pico, esta persona resbaló unos diez metros y arrastró a otro de sus compañeros en la caída, aunque el tercero de ellos pudo detenerlos, informa la Guardia Civil.

Aunque no resultaron heridos, no se vieron capacitados para reanudar la actividad ante el temor de volver a caer pendiente abajo. Además, el calor en esas horas del día unido a la pendiente del corredor, produjo el desprendimiento de cantidades de nieve que comprometía su seguridad, por lo que llamaron a emergencias.

Dos especialistas del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña se desplazaron la lugar junto a la tripulación del helicóptero de la Unidad Aérea de la Guardia Civil para su evacuación.

Según la Guardia Civil, de haberse recibido el aviso más tarde del horario permitido de vuelo no hubiera sido posible contar con medios aéreos, por lo que el auxilio se habría prolongado al tener que desarrollarse a pie y con mayores dificultades.

Los agentes tuvieron que realizar un apoyo parcial del helicóptero sobre un saliente rocoso para hacer viable la evacuación de los montañeros, que fueron trasladados a un lugar seguro.

La Guardia Civil recuerda que las actividades en montaña pueden resultar bastante peligrosas si no se llevan a cabo en las condiciones de seguridad adecuadas, para lo que es necesario valorar la situación meteorológica y de luz disponibles antes de abordar cualquier actividad, así como disponer de la capacitación y nivel técnico adecuados.