Los trabajadores de la empresa cordobesa Panaderías Reunidas Cordobesas S.A. (Pan Recor) comenzaron ayer una huelga indefinida con la intención de lograr un ERE voluntario. Esta marca tradicional cordobesa ya pidió un concurso de acreedores en 2015, del que logró salir, pero su situación económica ha provocado esta paralización ante los reiterados incumplimientos que sufren sus trabajadores.

Joaquín García, miembro del comité de empresa y delegado sindical de UGT explica a COPE que el problema se remonta ya a cerca de ocho años: “La empresa empezó a adeudarnos y llegaron a debernos tres o cuatro nóminas, por lo que solicitó la administración concursal para llegar a un acuerdo extrajudicial para los pagos fraccionados. Esas nóminas pendientes se fueron pagando durante un tiempo”.

Eso fue en 2016 y durante los cuatro años siguientes “se fueron pagando esas deudas hasta que el año pasado, de forma abrupta, esa deuda se dejó de pagar. En ese acuerdo había un plazo de seis meses de receso en el que la empresa podía no pagar. Con la pandemia la empresa consiguió que el plazo de seis meses se alargara un poco más, pero de esa deuda no hemos vuelto a ver más”.

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Hoy, los trabajadores de Pan Recor hemos tenido que tomar una decisión a la que nunca hubiesemos deseado llegar, pero la crítica situación nos obliga tomar. Nos ponemos en huelga. Esta noche no se hará pan. pic.twitter.com/0g9FUHCl6P

— Javi Jiménez (@javijimenezccf) May 23, 2021

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A eso “tenemos que añadirle que en los últimos tres años han ido adeudando casi a razón de una nómina por año sin explicación ninguna y desde primeros de año hasta ahora la situación ha sido crítica y de las últimas cinco nóminas apenas se han cobrado una o dos”.

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Así que “hay gente en la empresa a la que se le deben nueve o diez nóminas. Hay que aclarar que no son diez nóminas seguidas, sino que nos deben diez en total”.

Tras la aceptada solicitud de un concurso de acreedores lo que están esperando los trabajadores es que “el administrador presente el informe, que esperamos que sea de liquidación y que esto termine cuanto antes posible”, sobre todo porque “la situación es insostenible: familias rotas, tensión, ansiedad... Es más una cuestión de dignidad y moral que económica. Lo único que queremos es que esta pesadilla termine de una vez. Nuestra intención con la huelga es acelerar lo más posible y que esto termine cuanto antes”.