La desastrosa idea de la Entitad Local Autónoma de Zahara de los Atunes y de sus comerciantes de fumigar con lejía sus playas puede tener consecuencias importantes. Y es que según explican desde la Agrupación de Voluntarios Trafalgar "muchas especies de la propia playa podrían haber muerto ante esta horrible idea".

«Han arrasado los espacios dunares y han ido contra todas las normas. Ha sido una aberración lo que han hecho, teniendo en cuenta además que el virus vive en las personas no en la playa. Es una locura lo que han hecho contra la propia playa», explica Maria Dolores Iglesias, presidenta de esta asociación de voluntarios. Desde el colectivo contemplan llevar el tema a los juzgados y denunciar lo que han hecho, «una auténtica locura».

El delegado Territorial de Medio Ambiente de la Junta en Cádiz, Daniel Sánchez, ha anunciado que ha sido abierto un expediente sobre la fumigación con lejía. El mismo domingo 26, al tener conocimiento de los hechos, el Delegado mandó a la playa a un agente de medio ambiente para valorar el alcance, por lo que se levantó acta ese mismo día.

Ahora con el expediente abierto, se espera un nuevo informe del Departamento de Biofauna para que el instructor, según la valoración, pase a un posible expediente sancionador que podría conllevar una sanción económica de hasta 60.000 euros.

En riesgo el ecosistema

La iniciativa, promovida por la Junta Vecinal de la Entidad Local Autónoma y la Asociación de Comerciantes de Zahara de los Atunes, se llevó a cabo el pasado domingo día 26 de abril empleando, para ello, varios tractores. Según apuntan las organizaciones Agaden-Ecologistas en Acción y Voluntarios de Trafalgar, la zona afectada «se encuentra entre el Hotel Antonio, próximo a la urbanización Atlanterra, hasta la desembocadura del río Cachón, viéndose afectado incluso sistemas dunares que, en algún tramo del litoral, están protegidos como Hábitats de Interés Comunitario 2120».

Ambas entidades indican que las playas de Zahara de los Atunes conforman «un ecosistema muy dinámico, y no exento de complejidad, ya que forman parte de la interfase entre el mar y la tierra encontrándonos con una gran riqueza en cuanto a flora y fauna, con especies incluso catalogadas como vulnerables».

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