La pobreza, la equidad y el papel de las comunidades indígenas en la lucha para la conservación y cuidado del medioambiente, "deberían tener un papel fundamental" en la próxima Cumbre de Cambio Climático (COP26) en Glasgow (Reino Unido), así como la reducción de emisiones y la responsabilidad de todos los países participantes en el cuidado del planeta, según asegura el ambientalista ecuatoriano, José Javier Guarderas.

Ecuador se sitúa entre los veinte países con mayor biodiversidad del mundo, con un 20 por ciento, además de encontrarse a la cola de los países "que menos contaminan" con un 0,15% de las emisiones de gases de efecto invernadero (CO2).

Sin embargo, de cara a la próxima COP26 Ecuador "tiene el compromiso de reducir el 22,5% de sus emisiones" y para lograr dicho objetivo "necesitaría inversiones de alrededor de dos billones de dólares". Por lo que Guarderas ha llamado a la "movilización" por parte de los países industriales en cuanto a fomentar economías sostenibles que ayuden a reducir dichas emisiones.

Este contexto de crisis climática termina afectando de manera "contundente" a los más "pobres" y a las sociedades indígenas que "tanto han aportado a la conservación de los ecosistemas y a la biodiversidad", sin recibir "nada a cambio", por lo que se convierten en los principales "perdedores" de esta situación, según sus palabras.

Asimismo, el ambientalista alerta de que hay que trabajar "en medidas de adaptación" al cambio climático, y tanto las empresas como los altos cargos o la sociedad "tienen el deber de aportar y trabajar en pequeñas iniciativas que sumen".

"Invertir en conservación", añade Guarderas, que defiende el modelo de economía circular y ayuda a otros negocios a revertir su esquema hacía la sostenibilidad para alcanzar una economía verde dentro de Ecuador. De esta forma, "generar riqueza, puestos de trabajos y emprendimiento".

El ambientalista es, además, fundador de los Premios Latinoamérica Verde, una plataforma gratuita que reúne 15.207 proyectos relacionados con sostenibilidad, economía circular y medioambiente de más de mil ciudades diferentes de 41 países latinoamericanos, además de contar con España, Estados Unidos y el Caribe, con el fin de ayudar a su emprendimiento.

Este evento, según explica Guarderas, "nació a partir de un dato revelador que decía que el 85% de los proyectos en Latinoamérica no llegaban a feliz término" por no tener una plataforma de conectividad, red de contactos, medios de comunicación que ayuden a difundirlos e inversión y, por esa razón, el fundador los aglutinó en un mismo sistema y facilitó su llegada a nuevos inversores que quisieran seguir adelante con la iniciativa. Gracias a este modelo, "siete de cada diez proyectos lograron tener éxito".

Se trata de historias colectivas de emprendimiento y comunidades que "luchan por tener una economía más verde", que es primordial para generar riqueza en el país, además de eficiencia en el modelo empresarial porque, en palabras de Guarderas: "Salvar el planeta es un buen negocio".

José Javier Guarderas, también director ejecutivo de la corporación de reutilización de neumáticos de Ecuador, SEGINUS, detalla a Efe que el reciclaje de estos objetos puede generar hasta "500 puestos de trabajo", así como siete millones de inversiones privadas. EFE.

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