La Semana Santa está marcada, por segundo año consecutivo, por la pandemia. Las habituales procesiones y actos que recuerdan la Pasión, muerte y resurrección de Jesús no saldrán a las calles este 2021 por la covid-19. Nuestro país ha vuelto este Miércoles Santo al riesgo alto al registrar una incidencia de 152 casos y notificar el Ministerio de Sanidad 8.534 nuevos casos en las últimas 24 horas. Asimismo, 154 personas han fallecido a causa del virus.

La cifra total de contagios en España se eleva ya a 3.284.353 desde el inicio de la pandemia, según las estadísticas oficiales. La incidencia acumulada en los últimos 14 días por 100.000 habitantes se sitúa en 152,25. Por desgracia, y con estos datos expuestos, la Semana más importante para los cristianos no podrá ser celebrada en toda su plenitud. Hasta 75.459 personas con prueba diagnóstica positiva han fallecido desde que el virus llegó a España, de acuerdo con los datos recogidos por el Ministerio.

Hace casi un año, el 8 de abril de 2020, se celebraba el Miércoles Santo también de un modo diferente. Más incluso que este 2021. En pleno confinamiento, Sanidad notificó 6.180 contagios. Los positivos totales en España llegaban a los 146.690. La incidencia acumulada en los últimos 14 días era superior a la que hoy ha notificado el ministerio que dirige Darias. 210,69 casos por cada 100.000 habitantes. El Ejecutivo, por estas fechas, también publicaba en el BOE el precio máximo de venta al público de las mascarillas quirúrgicas y las soluciones hidroalcohólicas. Un modo de evitar la especulación de los precios de estos objetos que se volvieron fundamentales en nuestro día a día.

DEL CONFINAMIENTO AL CIERRE PERIMETRAL POR SEMANA SANTA

De ese confinamiento que sufríamos, hemos pasado a un cierre perimetral total por Semana Santa en todas las autonomías y con la amenaza acechando de una cuarta ola. El incremento en la seguridad en playas o el aumento de los controles por parte de la DGT en Semana Santa son varias de las múltiples medidas que se están llevando a cabo para evitar desplazamientos innecesarios siendo una forma de frenar comportamientos inadecuados. Son incontables las declaraciones de las autoridades sanitarias apelando a la responsabilidad sobre todo, incidiendo en ese discurso en festivos y días señalados como los que estamos atravesando.

Ahora será posible disfrutar de la Semana Santa, de nuevo en unas circunstancias excepcionales, aunque con mayores licencias que el año anterior en el que era imposible acudir a una Iglesia por el confinamiento impuesto para doblegar la curva.

A pesar de esa limitación de movilidad, los cristianos tratan de celebrar estos días tan señalados visitando, al menos, en los templos. Un ejemplo de ello es lo que está sucediendo en autonomías como Andalucía, que viven con fervor estas fechas y que acuden a los templos para visitar los pasos que no saldrán a las calles.