Desde el comienzo de las ventas por parte de las empresas farmacéuticas, los precios de las vacunas han variado a lo largo de los últimos meses, y no precisamente para reducirse, sino todo lo contrario, ascender de manera llamativa hasta situarse en cifras claramente superiores con respecto a las originales de principios de vacunación, allá por el mes de diciembre.

Fue entonces, antes de empezar a repartir las primeras dosis, cuando la Ministra del Gobierno de Bélgica filtró por redes sociales las cifras de cada una de las diferentes empresas que repartían dosis. Astra Zeneca era la más asequible por aquel entonces con un precio de 1,76 € la dosis; mientras que por otro lado podíamos localizar a Pfizer con un coste de 12 € la dosis, o Moderna, que ascendía hasta los 18 €, coronándose como la más cara de todas las dosis.

Poco después, los tuits fueron borrados, pero no pudo evitarse la filtración ante la comunidad internacional, que incluso pudo comprobar que países como España accedería a 20.873.941 dosis de las diferentes vacunas. Todo ello para poner en marcha una campaña de vacunación que se está alargando algo más de lo previsto aunque, eso sí, el avance de los últimos meses ha sido notable y digno de una auténtica remontada por parte del Gobierno de nuestro país, que sin embargo no ha conseguido llegar al objetivo de la inmunidad del rebaño aún a día de hoy.

Aumento de precios

Con el paso de los meses, y tras ver reducido el riesgo de emergencia con respecto a la vacunación, las farmacéuticas han dado un paso adelante respecto a la subida de precios por unidad de las dosis. Especialmente en el caso de Moderna y Pfizer, que a día de hoy han aumentado sus precios hasta niveles que antes no fueron planteados.

En esta ocasión, la dosis de Pfizer pasa a costar 19,50 €, o lo que es lo mismo, experimenta un ascenso de cuatro euros sobre el coste inicial que tenía en la época de diciembre de 2020. En el caso de Moderna, ocurre algo similar, aunque esta vez el precio será más alto aún. La dosis de Moderna tenía en el mes de diciembre un coste de 19 €, y en esta ocasión ascenderá hasta los 21,40 €, colocándose nuevamente como la vacuna menos accesible del mercado.

La previsión es que las farmacéuticas seguirán con esta tendencia al alza en los precios, y que multiplicarán sus ganancias a medida que se acerque el invierno, época en la que se prevé que empiecen a administrarse terceras dosis. Se prevé que Pfizer alcance una cifra de ganancias de en torno a 56.000 millones de dólares en el año 2022. Moderna, por su parte, no se quedará corta, ya que podría llegar a embolsarse 30.000 millones de dólares.