El 31 de agosto de 1997 Inglaterra se despertó con una noticia que marcaría la historia del país en los siguientes años. Lady Di, más conocida como Diana de Gales, había fallecido en un accidente de coche después de volver de una cena. Su muerte consternó a los ingleses y al mundo entero, que miraban con asombro lo que estaba pasando en el país anglosajón.

Su funeral, para dar responso al cuerpo de la princesa de Reino Unido, tuvo lugar hace hoy 23 años. Era un 6 de septiembre de 1997. Probablemente este ha sido uno de los acontecimientos más retrasmitidos del siglo XX, ya que ha dejado unas cifras, anécdotas e imágenes que son difíciles de superar.

Se calcula que un millón de personas se acercaron a las calles donde se iba a presenciar el cortejo fúnebre, que comenzó en Hyde Park y llegó hasta el palacio de St. James. Los periódicos del día siguiente, además de hacer una retransmisión llena de imágenes, también fotografiaron a los servicios sanitarios atendiendo desmayos a raíz de la cantidad de gente que se reunió en las inmediaciones de las céntricas calles londinenses.

Una cifras récord

Las televisiones, en especial la cadena pública inglesa BBC, alcanzaron cuotas de audiencia terribles. 32 millones de personas en Inglaterra siguieron el funeral por televisión y más de dos millones de personas a nivel global. El funeral de Michael Jackson en Estados Unidos, con una población cinco veces mayor que la de Inglaterra, la siguieron 31 millones de personas, lo cual indica que este ha sido uno de los acontecimientos a nivel nacional, y mundial.

Pero sin duda las imágenes que dejó este funeral ha sido lo más destacado. Entre los invitados, encontramos a personas de la alta sociedad como Tom Hanks, Steven Spielber o Tom Cruise, además de Luciano Pavarotti y Nicole Kidman.

El mundo de la moda también quiso estar presente, con Donatella Versace (que había enterrado a su hermano un mes antes) y Anna Wintour entre los nombres más destacados. Lady Di era una fanática de la moda, y fue enterrada con un vestido largo diseñado por Catherine Walker, una de sus diseñadoras de referencia.

Fue inevitable que altos cargos políticos también estuvieran presentes, como la primera ministra del país, Margaret Thatcher y Tony Blair, además de otro como la princesa Margarita y Nelson Mandela. Nadie acudió en representación de la Casa Real española, pese a que Juan Carlos mantenía una buena relación con Carlos y Diana, especialmente estrecha en los primeros años de su reinado.

Uno de los momentos más especiales

Uno de los momentos más especiales vino de la mano de Elton John. El amigo personal de Diana cantó una versión de su tema Cande in the Wind. En esta ocasión, a diferencia de lo que dice la letra original, el compositor quiso dedicársela a su amiga Lady Di y por eso comenzó con un verso que decía lo siguiente: "Adiós, rosa de Inglaterra, tal vez crezcas en nuestros corazones". Una versión que, en aras de las cifras de audencia que dejó el funeral, no extraña que pudiese mantener 14 semanas en el número uno de Estados Unidos y todavía hoy es el segundo single más vendido de la Historia.

El cuerpo de Diana está enterrada e Althorp, una de las residencias familiar de Lady Di. Allí los curiosos que quieran guardar responso a la princesa de gales pueden ir durante los meses de julio y septiembre, aunque la familia quiso establecer ciertas limitaciones para no dañar las instalaciones y que ellos pudiesen visitar a Diana cuando quisieran con tranqulidad.

Hoy, pese al coronavirus, será uno de esos días que en la mente de muchos ingleses se recordará a la Princesa de Gales, una persona dentro de la Casa real que cuenta con más popularidad pese a que se celebre casi un cuarto de su siglo de su muerte.