Solo han pasado unas horas desde que los obispos españoles eligieran a Don Ricardo Blázquez como nuevo presidente de la CEE y, para ellos, solo tiene palabras de agradecimiento. "Me siento tranquilo aunque evidentemente con la responsabilidad que significa que los compañeros me hayan elegido presidente de la Conferencia Episcopal. Quiero ponerme a su disposición, a todos ellos muestro mi gratitud y mi respeto". E incide en que "el cargo tiene una historia muy larga. Las conferencias episcopales para la Iglesia universal fueron creadas en el Concilio Vaticano II y son una manifestación de la solidaridad en el ministerio".

¿Qué urgencias trae el cargo bajo el brazo? "Las urgencias nos vienen no solo desde nuestra experiencia diaria en las diócesis sino también desde las orientaciones que nos marca el Papa Francisco. En ellas está la de ser misionero como centro de nuestra tarea, un salir apostólico. Este salir misionero tiene que ver con el gozo del Evangelio, la alegría de la fe y la dicha en evangelizar. La identidad de la Iglesia pasa por la misión. No estamos llamados a recluirnos en un lugar sino a vivir la familia de la fe siempre con puertas abiertas para entrar y para salir".

¿Qué significa creer en Dios? "Vengo reflexionando, pensando y viviendo también sobre lo que es creer en Dios y no creer. No es lo mismo, ni muchísimo menos. Cada uno de nosotros tenemos unas coordinadas que enmarcan nuestra vida. La fe en Dios es al mismo tiempo fundamento y surtidor de esperanza. Deseo a todos el gozo y la dicha de la fe en Dios. Nos viene muy bien a todos creer en Dios".

El nuevo presidente de la Conferencia Episcopal se ha referido también al hecho de que muchas personas escondan su fe al ámbito privado. "A veces aunque públicamente se dice que Dios no interesa, realmente cuando hablamos de manera personal la verdad de Dios sí afecta. Hay que tener la seguridad de que nos están esperando con una palabra sencilla, de proclamación gozosa, de sentirnos bien en nuestra propia piel. Hemos recibido un mensaje importantísimo para la orientación de la vida personal, familiar, social y no vamos a recluirla a la interioridad del corazón o a los muros de la familia. Hay que mostrarla sin alardear de nada y con la conciencia de prestar un buen servicio, humildemente pero con libertad".

Escucha la entrevista completa a monseñor Ricardo Blázquez en 'El Espejo' de COPE.