Llevan concentrados frente al Ministerio de Sanidad desde el 16 de abril reclamando su derecho a una vivienda digna. Entre las más de 90 personas sin hogar que forman este campamento están Joaquina, de 59 años, que cobra 300 euros de paro. “Yo solo pido una vivienda, no quiero dinero, me basta con un abrazo”, ha dicho Joaquina, que vive en una tienda junto a su marido Antonio y su hijo que tiene síndrome de Asperger.

Alrededor de unas 70 tiendas de campaña, casi todas de color verde, están acampadas en la mediana central del Paseo del Prado. Tienen montada hasta una pequeña cocina con una olla donde preparan la comida del día a día. Entre todos se ayudan en su lucha por una vivienda digna. Pasadas las elecciones generales del 28 de abril y las del 26 de mayo, nadie se ha acercado a hablar con ellos. Quieren que se cumplan los artículos 47 y 35 de la Constitución que garantizan el derecho a una vivienda y a un trabajo digno.

En COPE también hemos hablado con Angy, de 22 años, embarazada de 4 meses. Para ella es muy difícil encontrar un trabajo viviendo en la calle: “Para trabajar tienes que mantener una higiene, un descanso, no te puedes poner a trabajar 12 horas de camarera durmiendo en la calle”.

En ocasiones la policía se pasa por aquí, pero de momento no les han desalojado. Ellos piensan quedarse hasta que se les escuche. Se han movilizado pidiendo reuniones con el Ayuntamiento y el Defensor del Pueblo, pero nadie les ha dado solución.