Soprendidos y decepcionados, ante una recomendación que es "impropia de una administración". Así se muestran desde la Asociación de Editores de Libros de Texto (ANELE) ante la recomendación de la Comunidad de Madrid de mantener los actuales manuales el próximo curso escolar.

Su presidente, José Moyano, asegura que llevan meses de trabajo para poder llegar a tiempo a septiembre, de reuniones con la Consejería de Educación, "la última, la pasada semana" por lo que no entienden el cambio de actitud. "Teniamos muy desarrollado el currículo de Madrid porque aunque no esté publicado, ya nos habían pasado los borradores de los decretos desde hace tiempo", explica.

"Es impropio de una administración que nos prometa una cosa en una reunión y una semana después haga la contraria". Por eso anuncian que van a pedir compensaciones. "Vamos a pedir responsabilidad patrimonial por todas las inversiones que hemos realizado", dice contrariado, porque "con actitudes como esta, se ponen en riesgo los 40 mil empleos que dependen del sector".

Desde ANELE, eso sí, confían en el “sentido común” de los centros y de los docentes, porque creen que no posible seguir con los mismos libros con el cambio curricular que se avecina.

En esta idea, coinciden también algunos centros educativos y profesores consultados. Por otro lado, la lentitud con la que las Comunidades, entre ellas Madrid, están desarrollando sus partes del curriculo, tampoco ayuda.

Esto se traduce en incertidumbre para las familias. Desde la Confederación de Padres de Alumnos, su presidenta Begoña Ladrón de Guevara, pide que se aclare lo antes posible. "En estas fechas, ya tienes que pensar los libros, si hay comprarlos o no, el desembolso. Cualquier decisión tiene que estar tomada antes de que se acabe el curso escolar para mitigar cualquier problema", asegura.

Aunque muchos centros como los de Escuelas Católicas creen que no va a ser hasta prácticamente septiembre cuando se sepan qué libros se van a usar. En COPE, su secretario regional, José Antonio Poveda explica que "puede haber situaciones muy variopintas. Asignaturas con libros vigentes y otras con libros nuevos. La decisión sobre qué libros compro va a haber que retrasarla".