El Partido Popular planteó ayer en el Congreso una declaración de apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en Cataluña, ante los graves disturbios de los últimos días. Como era de esperar, los grupos independistas rechazaron la propuesta que, para ser aprobada, requería la unanimidad de los grupos parlamentarios. Lo llamativo es que hicieron falta largas horas de negociaciones para que el PSOE firmase finalmente el documento tras un intento de desvirtuarlo con diversas enmiendas, entre ellas la de no considerar como “graves disturbios”, lo sucedido en diversas ciudades catalanas. Al tiempo que esto ocurría, los partidos independentistas trataban de dar una imagen de unidad en el Parlamento de Cataluña, aprobando que vuelva a debatirse el supuesto derecho a la autodeterminación, lo que supone un nuevo reto al Tribunal Constitucional que ya advirtió del carácter ilegal de este tipo de iniciativas.

La gravedad de los hechos y la pasividad de la que está haciendo gala  Pedro Sánchez, han movido al antiguo alcalde socialista de La Coruña, Francisco Vázquez y a otros diputados de las primera Cortes democráticas, a convocar este domingo concentraciones en toda España, en apoyo a los catalanes no separatistas y mostrarles así que no están solos. La iniciativa tiende a recuperar el “espíritu del 78”, es decir, aquellos valores que hicieron posible la Constitución. Es un momento para dejar a un lado intereses partidistas y renovar la unidad en lo esencial como tarea política prioritaria.