El resultado de las elecciones a la Comunidad de Madrid es inapelable. El Partido Popular ha ganado las elecciones y su candidata, Isabel Díaz Ayuso ha conseguido lo más difícil: doblar en escaños el resultado que el partido obtuvo hace solo dos años.

Díaz Ayuso tomó una decisión arriesgada cuando cerró el paso a una moción de censura que amenazaba su Gobierno. La noche electoral les ha dado la razón. El PSOE y su candidato Ángel Gabilondo han cosechado un resultado pésimo. Peor ha sido el resultado de Unidas Podemos y su candidato Pablo Iglesias. No parece que la coalición que gobierna España sea la fórmula política que los ciudadanos de la Comunidad de Madrid quieren para gestionar la recuperación post pandemia. Más Madrid y Mónica García consolidan sus apoyos y Vox ocupa un quinto lugar sin que este partido tenga posibilidad alguna de intervenir en el programa de Gobierno del PP.

La salida de Ciudadanos de la Asamblea de Madrid no es una buena noticia. Y tampoco es buena noticia que los votos de la extrema izquierda superen con creces los apoyos electorales que ha obtenido el Partido Socialista Obrero Español.

Los ciudadanos han querido que el PP gobierne en solitario y de hoy en adelante la Comunidad de Madrid estará, más si cabe, en el punto de mira del resto de los españoles. A partir de hoy día 5 de mayo, el PP se enfrenta a una gran responsabilidad política. Gestionar con serenidad y con sensatez un apoyo electoral como el cosechado es el gran desafío de una fuerza política que en el medio plazo espera convertirse en una alternativa de Gobierno para España.