Barcelona: Colau decide

El republicano Ernest Maragall sigue insistiendo en que Ada Colau debe favorecer un Ayuntamiento independentista en Barcelona, mientras que Valls está dispuesto a favorecer un ayuntamiento con Colau al frente, para impedir que de la mano de Maragall, Barcelona se convierta en punta de lanza del movimiento independentista. El PSC guarda silencio, aunque ha dejado claro que no apoyará a Maragall para la Alcaldía. Para acabar de complicar el panorama, los Comunes no contemplan otra posibilidad que la de que Ada Colau sea la alcaldesa de Barcelona en un Gobierno tripartito de izquierdas, con ERC y el PSC.

Pese a lo complejo del asunto no es imposible, aunque sí difícil, que en Barcelona sucedan cosas parecidas a las que van a pasar en Tarragona o Sabadell, o en la Diputación de Barcelona. El PSC, gracias a los Comunes, mantendrá las citadas alcaldías. Colau podría seguir siendo alcaldesa con los votos del PSC y los de Valls. Una solución que no es la ideal para el constitucionalismo, pero sí la menos dañina.

Los Comunes van a tener que tomar la decisión final y aunque les pese deberán aceptar que en este momento lo que se dirime en Barcelona es si la ciudad va a tener un Ayuntamiento independentista o no, más allá del sesgo ideológico del próximo consistorio. Colau tiene que dejar de jugar a la ambigüedad. Le ha funcionado más o menos bien cuando estaba en el poder, pero no puede seguir manejándose en la incertidumbre.