Turquía ha anunciado que se reunirá en agosto con Finlandia y Suecia para abordar sus ingresos en la OTAN

Turquía, Finlandia y Suecia celebrarán en agosto una reunión para verificar el grado de cumplimiento de los compromisos que aceptaron los dos países escandinavos en la cumbre de la OTAN en Madrid, a fines de junio, para que Ankara levante el veto a su ingreso en la Alianza Atlántica.

La reunión de altos funcionarios "será la primera de un comité de seguimiento" de los avances en el cumplimiento del "acuerdo firmado el mes pasado", informó el ministro turco de Exteriores, Mevlüt Çavusoglu, a la emisora TRT Haber.

El anuncio de esas conversaciones se produce después de que el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, advirtiera esta semana de que aún puede reactivar el veto de su país a la adhesión de Suecia y Finlandia en la OTAN, pues su levantamiento sigue "condicionado".

"Si Finlandia y Suecia no dan los pasos necesarios para cumplir nuestras condiciones, congelaremos el proceso", dijo Erdogan.

Turquía había bloqueado la entrada de Finlandia y Suecia en la Alianza Atlántica, argumentando que dan cobijo y apoyos a personas consideradas terroristas por el Gobierno turco, antes de alcanzar un acuerdo con ambos países en Madrid y levantar su veto.

Ello permitió la firma de los protocolos de adhesión, pero aún se requieren las ratificaciones de los 30 países miembros de la OTAN para que las dos democracias nórdicas, hasta ahora neutrales, se conviertan en miembros de pleno derecho.

En reiteradas ocasiones, Erdogan ha dejado claro que el Parlamento turco no tramitará las correspondientes ratificaciones hasta que los candidatos cumplan con los requisitos, que entre otros incluye la extradición de decenas de personas acusadas de terrorismo.