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La OTAN sumaría con Finlandia un importante refuerzo militar y más control en la frontera con Rusia

La neutralidad se ha acabado por un conflicto que, temen, pueda llegar a sus fronteras propulsado por la mente malvada de Putin

La OTAN sumaría con Finlandia un importante refuerzo militar y más control en la frontera con Rusia

Madrid

Tiempo de lectura: 3'Actualizado 01:10

El presidente de Finlandia, Sauli Niniiströ, y la primera ministra del país, Sanna Marin, han anunciado este domingo la solicitud de la entrada del país en la Organización para el Tratado del Atlántico Norte (OTAN) con la intención de "maximizar" sus opciones de seguridad tras la invasión rusa de Ucrania.

Marin ha expresado su deseo de que el proceso de ratificación sea "tan rápido y fluido como sea posible" y que "ningún miembro de la organización ha avisado de problemas al respecto", en referencia a las declaraciones formuladas el viernes por el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, sobre su disconformidad ante los planes de adhesión de Finlandia y Suecia.

Una gran aportación para la Alianza

Además de ganar frontera directa con Rusia, otra de las contribuciones beneficiosas de Finlandia a la OTAN sería su ejército Finlandia todavía tiene servicio militar obligatorio y podría movilizar unas fuerzas armadas conformadas por unos 22.000 soldados en activo. Es el cuarto país del mundo con más reservistas. En total, 900.000 personas estarían preparadas para el servicio en un momento dado, una cantidad tan solo superada por Taiwán, Brasil e India.

Es curioso que en el país el sentimiento de la población finlandesa siempre ha sido el de una oposición radical a entrar en la OTAN. En 2017, antes de la agresión rusa a Ucrania, las encuestas en Finlandia señalaban que solo un 19% de la población estaba a favor del ingreso en la OTAN, frente a un 53% en contra, según los sondeos de la compañía de radiodifusión pública de Finlandia.

Cambio de opinión en la sociedad por la guerra

En la última encuesta, realizada a finales de febrero de 2022, después de que Putin iniciara la invasión, el porcentaje a favor de la adhesión superó el 50%. Los datos más recientes revelan un cambio de tendencia histórico con el 63% de los encuestados a favor.

La neutralidad se ha acabado por un conflicto que, temen, pueda llegar a sus fronteras propulsado por la mente malvada de Putin. El cambio de opinión en sus poblaciones, que hasta ahora estaban muy divididas ha sido radical.

Este cambio de postura, que ahora refrenda el Gobierno finlandes con esa petición formal que puede llegar en los próximos días, puede acarrear un problema para las arcas de un estado tan saneado como es el de Finlandia con uno de los mejores índices de calidad de vida del mundo, y es que en 2021, casi el 12% de las importaciones de Finlandia procedían de Rusia. En concreto, la dependencia del gas natural procedente de Rusia alcanza el 68%. De hecho, ya ha habido consecuencias. Putin ya ha cerrado el grifo energético a Finlandia.

Requisitos y pasos para ingresar en la Alianza

En cuanto a los requisitos, es necesario ser una país europeo, ser una democracia, tener implantada una economía de mercado y poder contribuir a la seguridad de de la Alianza.

Eso se traduce en que tienen que invertir, en principio un 2% de su PIB en defensa, pero ya hemos visto que la mayoría de países, menos Estados Unidos y alguno más, se lo salta. También hay que hacer una estandarización en cuanto al equipamiento militar. Incluso en cuanto al uso del idioma porque en la OTAN se habla inglés y francés.

En cuanto a los pasos, primero se debe producir una invitación al país solicitante. En ese momento, comienza un periodo de negociaciones de de adhesión en la sede la de OTAN en Bruselas, para valorar si el país cumple con las condiciones necesarias para unirse a la OTAN. El siguiente paso es establecer un calendario de reformas para poder adquirir esas condiciones si fuese necesario.

A partir de ahí, los países solicitantes pueden entrar en ese momento en un periodo de transición. Empezando por una fase de "diálogo intensificado" con la OTAN y más tarde arrancando el Plan de Acción para la Adhesión. Por ejemplo, Ucrania se encuentra ahora mismo en la fase de "diálogo intensificado".

Después, la OTAN prepara un protocolo de adhesión concreto para el país que desea unirse, y que después debe ser ratificado por los países concretos. En este se paso se pueden incluir demandas concretas al pais candidato. Una vez que el país candidato aplica esos cambios legislativos, si fuesen precisos, culminaría definitivamente el proceso tras la entrega en el Departamento de Estado de Estados Unidos los documentos de ingreso en la OTAN.

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