Lo bueno de cometer errores es que de ellos se aprende. El de estos albañiles seguro que será recordado durante mucho tiempo como una de las anécdotas más insólitas que hayan vivido como trabajadores de la construcción.

En la localidad argentina de Córdoba, una cuadrilla de albañiles se encontraba realizando distintas tareas de mantenimiento en un edificio, cuando sucedió lo inesperado. Dos operarios, ajenos a lo que estaban a punto de protagonizar, tuvieron que detener su trabajo al percatarse, gracias al chivatazo de otro compañero, de lo mal situada que estaba una escalera.

El vídeo comienza con la narración de un trabajador diciendo: "Acá podemos ver que de este lado ya está soldado el caño. Bien soldadito el caño, hermoso. Pero, sigamos mirando el caño". Mientras, el hombre sigue grabando la pieza hasta que enfoca a los dos obreros que están soldado el otro extremo de la tubería con una escalera atravesada.

Es en ese momento y no en otro cuando los operarios se dan cuenta de su error garrafal y no les queda más remedio que unirse a las bromas y a las risas de sus compañeros y tomarse las cosas con buen humor. Al fin y al cabo, el error tenía fácil solución: cortar el caño, sacar la escalera y rematarlo de nuevo.