Repique de campanas y 96 salvas en el día que Carlos III se dirigirá a la nación por primera vez

Los británicos lloran la muerte de su reina, Isabel II, el día después de su fallecimiento en el Castillo escocés de Balmoral. En los alrededores de su residencia londinense, en el Palacio de Buckingham con su bandera a media asta, siguen congregándose numerosos ciudadanos. Previsiblemente el funeral será el lunes 19 de septiembre.

Carlos III será proclamado formalmente este sábado como nuevo rey de Inglaterra. El hasta ahora príncipe de Gales será proclamado formalmente como rey de Inglaterra, si bien la muerte de su madre ya le elevó automáticamente al puesto dado que era el primero en la línea sucesora.

Por lo pronto, la cita obligada es este viernes a las 7 de la tarde, hora española, donde el nuevo monarca dará su primer discurso en el que rendirá tributo a su madre y se comprometerá a ejercer sus funciones como nuevo soberano del país.

Precisamente Carlos III vuelve esta mañana a la capital británica donde va mantener una audiencia con la recién nombrada primera ministra, Liz Truss. Hay que preparar el calendario previsto para los próximos días.

Hoy además se espera que la Abadía de Westminster, la Catedral de Saint Paul y el Castillo de Windsor, en Londres, hagan tañir sus campanas al unísono a las 12.00 GMT al tiempo que se efectuará una salva de 96 cañones -los años que tenía la monarca- en Hyde Park y en otros enclaves de la capital.

Otra novedad es que en la catedral de San Pablo, a las 18 hora local, un servicio litúrgico abierto al público con sitio para dos mil ciudadanos británicos.

El país entero guardará hoy un minuto de silencio en torno al mediodía. Carlos tendrá además que decidir la duración -probablemente un mes- del periodo de duelo de los miembros de la familia real e instituciones dependientes de la realeza mientras las banderas de la Union Jack en edificios de la Monarquía ondean a media asta.

El príncipe Enrique, hijo menor del nuevo rey británico, Carlos III, abandonó esta mañana a primera hora el castillo de Balmoral (Escocia), donde ayer falleció su abuela.

Enrique se había desplazado ayer por la tarde al castillo sin su esposa, Meghan, quien permaneció en Londres, según la prensa local, al igual que su cuñada, Catalina, esposa del príncipe Guillermo, quien también se quedó en la capital con sus tres hijos, Jorge, Carlota y Luis.

Pese a haber acudido a Balmoral, el príncipe Enrique y otros miembros de la familia no tuvieron ocasión ayer de despedirse de su abuela, ya que para cuando llegaron a la residencia, la soberana ya habría fallecido, rodeada de algunos familiares, como su primogénito, Carlos, y su hija la princesa Ana, según los medios locales.