Antonio Montero Jodorovich, hijo del patriarca de este clan históricamente vinculado al tráfico de drogas en Barcelona, ha acordado con la Fiscalía una condena de un año y nueve meses de cárcel por su "frenética actividad ilícita" en la adquisición y distribución "al por mayor" de cocaína y marihuana.

En su acuerdo de conformidad, que tendrá que ser ratificado ante el tribunal de la sección 21 de la Audiencia de Barcelona al inicio del juicio, previsto para el próximo 18 de enero, el miembro del clan de los Jodorovich acepta una condena de un año y seis meses de cárcel y una multa de 20.000 euros por un delito contra la salud pública y otros tres meses de cárcel por pertenencia a grupo criminal.

Por esta causa, Antonio Montero Jodorovich ya estuvo en prisión preventiva desde febrero de 2016, tras ser detenido en un amplio dispositivo de los Mossos d'Esquadra, hasta julio de 2017.

En el acuerdo de conformidad, suscrito por los nueve acusados en esta causa, Antonio Montero Jodorovich reconoce que, con la intención de obtener un "sustancioso e ilícito enriquecimiento", se dedicó a la adquisición y posterior distribución "al por mayor" de cocaína y marihuana en el área de Barcelona.

Para llevar a cabo su actividad ilícita, el hijo del patriarca de los Jodorovich admite en su pacto con la Fiscalía que mantuvo acuerdos de colaboración con los otros acusados y otras personas implicadas en piezas separadas de este proceso, aunque sin que estuviese definida una "rígida cadena de mando" ni "perfilados líderes concretos".

Según el acuerdo con la Fiscalía, para sostener una "frenética actividad ilícita", Antonio Montero Jodorovich permanecía en contacto telefónico continuado con proveedores de droga y compradores, concertando con ellos suministros, traslados y entregas.

Antonio Montero Jodorovich, que en 2011 fue condenado a diez años de cárcel junto a su padre, su hermano y otros seis miembros del clan, fue detenido por este nuevo caso por los Mossos d'Esquadra en febrero de 2016, cuando se encontraba en libertad después de que el Tribunal Supremo anulara su sentencia por un defecto de forma.

De hecho, el Supremo ya rebajó en 2014 casi a la mitad, de quince a ocho años y tres meses de cárcel como máximo, otra condena a 17 miembros del clan Jodorovich, al entender que no integraban una organización criminal, sino que tenían una "estructura elemental" para vender drogas a pequeña escala.