A punta de pistola y con un casco de moto irrumpió hasta en siete salones de juego de localidades del sur de Madrid para robar el dinero de sus cajas. Todas las víctimas relataron a la Policía que el ladrón caminaba "raro", con las piernas arqueadas, lo que llevó a situarle en todos los atracos.

Fue detenido tras perpetrar el séptimo asalto a un salón de juego de Madrid y llevarse un botín de casi 8.000 euros, según informa la Jefatura Superior de Policía en un comunicado.

El detenido no actuaba solo, ya que a las puertas de los establecimientos esperaba su compinche para darse a la fuga, normalmente en una moto de gran cilindrada.

Además, se logró detener a una tercera persona por encubrimiento ya que trató de ocultar y destruir pruebas de los delitos cometidos.

La investigación se inició en octubre del pasado año cuando se cometieron dos atracos en Leganés y otro en la localidad de Móstoles.

La forma de actuar de los atracadores resultaba similar y tenían un claro reparto de funciones: Uno entraba y el otro esperaba fuera.

Los investigadores detectaron que el varón que amenazaba a los empleados con un arma de fuego en los locales de apuestas andaba de una forma muy llamativa, "como con las piernas arqueadas hacia afuera", detallan a Efe fuentes policiales.

Esta "peculiar" forma de caminar ayudó a los agentes a la hora de relacionar al detenido con la comisión de todos los atracos.

Durante la investigación se registraron los domicilios de los presuntos autores, encontrándose un arma de fuego simulada en cada uno de los domicilios de los arrestados, dos machetes de grandes dimensiones así como cascos y pasamontañas con los que cubrían sus rostros durante los atracos.

La autoridad judicial decretó el ingreso en prisión provisional tanto del individuo que amenazaba a los empleados como del miembro que se encargaba de la huida, siendo puesto en libertad con cargos el responsable de encubrimiento.