Hace un mes que las farmacias tienen luz verde en España para comercializar pruebas anti-COVID de autodiagnóstico y lo que constatan es que hay demanda. De hecho, en estas pocas semanas, se han comercializado más de tres millones de estos test, más de 100.000 de estas pruebas a diario según los datos a los que COPE ha tenido acceso y que sitúan a Andalucía y Cataluña como las regiones con mayor demanda de España seguidas de la Comunidad de Madrid, la Comunidad Valenciana y Galicia.

Por entre 5 y 8 euros de media es posible comprar una de estas pruebas. Algunas farmacias las realizan “in situ” y otras únicamente las venden. Todas deben de informar a los usuarios de cuándo es el mejor momento para hacerlas, cómo extraer la muestra, cómo interpretar los resultados y qué hacer en caso de positivo que es siempre aislarse y consultar con el médico o el teléfono COVID de la Comunidad Autónoma.

¿Quiénes optan por las pruebas de autodiagnóstico?

“El perfil es muy variado, personas de todas las edades, sobre todo, jóvenes que han podido tener un contacto estrecho con algún caso positivo y, que no tienen la pauta completa de la vacuna y que optan por hacerse el test antes de viajar o de reunirse con familiares, en especial, con mayores o personas con enfermedades crónicas” explica a COPE Ana López Casero portavoz de Consejo General de Farmacéuticos.

Puede recurrir a estos test “cualquier persona que pueda tener una sospecha y que no tenga síntomas; con síntomas no deben ir a ningún sitio, tampoco a la farmacia sino aislarse y consultar con su médico o con el teléfono COVID de la Comunidad Autónoma”.

¿Para qué sirven?

Según explica a COPE Catalina farmacéutica en el centro de Madrid “es un test de uso personal y no puede emplearse por ejemplo como certificado para viajar al extranjero ni tiene validez para otras demandas administrativas u oficiales”.

Los de tipo nasal se han vendido más que los de saliva, pero ambos son igualmente eficaces y en las farmacias notan como en vísperas del fin de semana las ventas son algo mayores.

“Se han dispensado muchas de estas pruebas. Al principio hubo un boom y luego hemos visto que la demanda es constante, aunque los viernes sí notamos que se venden más”, señala Catalina.

Balance positivo

Los farmacéuticos hacen un balance de lo ocurrido en el último mes tras la entrada en vigor el pasado 22 de julio del Real Decreto que hizo posible la comercialización sin receta médica de estas pruebas de antígenos de autodiagnóstico.

“Es una herramienta fundamental para la detección precoz que los ciudadanos estaban esperando y demandando. Creemos que al incluirlos en la estrategia ha habido un salto cualitativo en el control de la pandemia dando mayor accesibilidad a la ciudadanía a estos test”, señala López Casero.

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¿Cómo se gestionan estos casos?

Como con el resto de las pruebas y en mayor medida con estos test de autodiagnóstico hay falsos negativos y falsos positivos. En caso de negativo en persona asintomática, pero que ha estado en contacto estrecho con un positivo se recomiendan 10 días de cuarentena. Si la prueba resulta positiva habrá que aislarse, contactar con el médico y corroborar ese resultado haciendo posteriormente un test de antígenos o una PCR en un laboratorio.

El Consejo General de Farmaceúticos ha firmado convenios en ocho Comunidades Autónomas para poder agilizar la comunicación de positivos a los responsables regionales de salud pública. La prueba en este caso no se hace en casa, sino que la practica un farmacéutico que después y previo consentimiento del usuario transmite el nuevo caso detectado a la consejería de Salud correspondiente para agilizar su seguimiento y hacer cuanto antes el estudio de sus posibles contactos.