Gobierno, empresarios y sindicatos empiezan a negociar la reforma del subsidio por desempleo. Un decreto que fue tumbado en el Congreso por Podemos, PP y Vox y del que dependen los 10.000 millones de euros de los fondos europeos. Patronales y sindicatos están a la espera de conocer lo que les presentan esta mañana desde el Ministerio de Trabajo.

El Ejecutivo apenas consultó a los agentes sociales antes de aprobar el decreto de una reforma que, según los expertos, no incentiva lo suficiente para salir del paro de larga duración. Reduce la sobre cotización a parados mayores de 52 años, que es lo que hizo que Podemos tumbara la norma y que el gobierno justifica como necesario tras el crecimiento del salario mínimo.

El malogrado decreto de la reforma del subsidio por desempleo, que es esa cantidad que se cobra cuando se agota el paro, recoge una subida de la ayuda durante el primer año de percepción, mayores posibilidades de compatibilizar con el cobro de un salario y una ampliación de los potenciales beneficiarios de 400.000 más del millón que lo perciben actualmente.

El Gobierno tiene menos de dos meses para volver a aprobar la reforma del subsidio por desempleo, un cambio ligado al cuarto desembolso de fondos de recuperación europeos por importe de 10.021 millones de euros, pago que podría ponerse en riesgo si finalmente se retrasa.

El plazo vence el 20 de marzo, fecha establecida por la Comisión Europea para evaluar los hitos asociados al cuarto desembolso, solicitado por España el pasado 20 de diciembre, días antes de que el Congreso derogase el decreto ley que incluía la reforma con el voto en contra de PP, Vox y Podemos.

Habitualmente se dan dos meses para estas evaluaciones, pero Bruselas lo ha ampliado a tres por las vacaciones navideñas y se entiende que se incluirá el subsidio de paro si llega a tiempo. También se podría dar más tiempo a España y alargar ese plazo por encima de tres meses, porque en principio las reglas comunitarias lo permiten si hay acuerdo con el país en cuestión.