Con poco entusiasmo han vivido los inversores la sesión de este jueves en los mercados financieros. Las Bolsas europeas han operado con pequeños altibajos, a la espera del plan B que presentará la primera ministra británica el próximo lunes y que se votará en el parlamento el día 29.

Los mercados apuestan porque finalmente no se producirá un Brexit caótico, que a fin de cuentas no beneficiaría a nadie.  La libra esterlina se mantiene firme, incluso se permite el lujo de superar esta tarde el cambio de 1,29 dólares.  El euro pierde fuelle, cotiza por debajo de 1,14 dólares.

La Bolsa de Londres ha cerrado el jueves con un moderado recorte del 0,3 por ciento. El índice Ibex 35 de la Bolsa española ha subido un 0,03 por ciento hasta 8.908 puntos.  Los bancos han bajado hoy con cierta fuerza.  Los expertos de Credit Suisse han rebajado sus previsiones sobre el sector financiero, mientras los analistas de Bank of America han empeorado su visión y sus objetivos sobre el sector de los medios de comunicación. Las acciones de Mediaset han caído hoy un 6 por ciento. Las de Atresmedia se han desplomado un 8 por ciento.

A la espera de noticias, los inversores han dedicado el día a repasar los últimos datos publicados. El IPC de la zona euro ha tenido crecimiento cero en diciembre, con una tasa anual del 1,6 por ciento, frente al 1,9 contabilizado en el mes anterior. Se aleja del objetivo de inflación del 2 por ciento que mantiene el Banco Central Europeo. Paralelamente, algunos analistas consideran que la economía alemana reducirá su crecimiento al 1 por ciento si finalmente se produce un Brexit desordenado. Si no se produjera, estiman un crecimiento del PIB alemán del 1,5 por ciento este año.

Los expertos de la agencia Fitch creen que el cierre temporal de la administración de Washington se dejará notar negativamente en el crecimiento de Estados Unidos en el primer trimestre.

Dentro de casa, la agencia Standard and Poor's  podría mejorar la calificación crediticia de España, que actualmente es de A-, incluso aunque el país incumpla sus objetivos de déficit.  Los expertos de Funcas han rebajado una décima sus previsiones de crecimiento económico para España, hasta el 2,1 por ciento en el presente ejercicio.  La deuda pública ha aumentado en 8.200 millones de euros, hasta 1,169 billones, lo que equivale a un 97,5 por ciento del PIB. Hoy el Tesoro ha colocado 4.610 millones de euros en deuda a medio y largo plazo. Los bonos a tres años ahondan en su rentabilidad negativa. La tesorería pública cobra un 0,047 por ciento a los inversores que colocan su dinero en estos títulos, frente al 0,039 por ciento anterior.  Los títulos a cinco años ofrecen un rendimiento del 0,289 por ciento (0,329 en la subasta precedente). Finalmente el Tesoro ha colocado deuda con vencimiento en  2024 y 2027 con rentabilidades del 0,565 y del 1,137 por ciento, respectivamente.