La temida cifra del IPC para todos los españoles ha salido esta mañana. Tal y como se ha anunciado, la inflación se modera en nuestro país medio punto en noviembre, hasta situarse en un 6,8% gracias a la luz y a los carburantes. Por lo tanto, baja una décima en el pasado mes en relación a octubre, llegando a la cifra más baja desde enero -justo antes de declararse la guerra de Ucrania, cuando el IPC se situó en 6,1%-. Sin embargo, el precio de los alimentos se ha disparado un 15,7% interanual, por lo que las familias van a notar en sus bolsillos el aumento a la hora de hacer la lista de la compra, y más cuando estamos a tan solo diez días de la Nochebuena, lo que implica que los ciudadanos empiecen a ir a los supermercados a por el cordero, pavo o marisco para la gran cena y la comida de Navidad.

¿Qué alimentos se han disparado?

El dato de noviembre es cuatro puntos inferior al pico alcanzado el pasado mes de julio, cuando la inflación escaló hasta el 10,8%, su nivel más alto desde septiembre de 1984. Con este mes en descenso, ya es el cuarto consecutivo en su tasa interanual, después de que en agosto bajara tres décimas, hasta el 10,5%; en septiembre disminuyera 1,6 puntos, hasta el 8,9%, y en octubre se redujera 1,6 puntos, hasta el 7,3%. Así hasta la fecha con un 6,8%. Por otro lado, dos de cada tres puntos del repunte de la inflación en los once primeros meses de este año se debe a los alimentos. En concreto, el IPC acumulado de enero a noviembre es del 5,5%, siendo el grupo de los alimentos responsable de un total de 3,1 puntos.

Respecto a noviembre de 2021, el precio de los productos se ha disparado un 15,7%. Los que más han subido han sido los otros aceites, casi un 56%; seguido del azúcar, un 50,2%; después vendrían las harinas y otros cereales, un 37,6%; y la mantequilla, un 37,5%. Pero la cosa no se queda ahí, porque hay otros alimentos que también han incrementado sus precios entre los que se encuentran básicos como la leche, casi un 31%; los huevos un 27,1%; seguido de los cereales, casi un 23%; patatas y sus preparados aumentan un 21,5%; la carne de ave un 16,6%; el pan, 14,9% más; legumbres y hortalizas frescas, un 14,6%; la carne de vacuno y porcino un 13,2%; crustáceos, moluscos y preparados de pescado, con un 12,5% más; el agua mineral, los refrescos y los zumos, 11,3%; el pescado fresco y congelado un 10,9%; y café, cacao e infusiones más de un 10%.

En definitiva, unos precios por las nubes, lo que va a hacer que las familias lo noten en los bolsillos a finales de mes. A las compras de los regalos navideños se suma la lista de la cesta, lo que van a convertir una de las navidades más caras. Un precio que se ha disparado en los últimos meses a causa de la inflación, la guerra de Ucrania y la crisis económica derivada del coronavirus.