Patricia Cristóbal

Acabar con el estereotipo de que las feministas son mujeres amargadas y enfadadas con el mundo: ese es uno de los retos del festival de humor feminista "Coñumor", que este fin de semana celebra su segunda edición en Rivas para demostrar que las mujeres "quieren matar al patriarcado... de risa".

Se trata de una iniciativa impulsada por el organismo Coñumor, dirigido por cuatro mujeres que un día, tomando cañas, decidieron que era necesario montar "el primer festival de humor feminista del mundo", para que el feminismo se empiece a entender desde la risa y no se conciba solo desde la confrontación.

"Las carcajadas son una herramienta muy potente y abren una nueva vía para criticar al sistema patriarcal, que hace tanto daño a hombres y a mujeres; porque la gente, al reír, se relaja y lo entiende mucho mejor", explica a Efe Marta Sitja, una de las fundadoras de Coñumor.

Sitja argumenta que en este festival "nadie se ríe de los de abajo, sino que se reivindica reírse del opresor, nunca del oprimido". Reniegan, en cierta medida, del humor tradicional que martiriza a "a los gitanos, a los moros, a las mujeres", entre otros colectivos; y, en el extremo contrario, piden "reírse del poder".

Advierten las organizadoras que mofarse de los poderosos ("y de las banderas") está teniendo "mucha repercusión en la actualidad, ¡está habiendo hasta cárceles!... Pero, pese a la que pueda caer, hay que seguir reivindicando burlarse del poder", aseveran.

En el programa del festival hay nombres de artistas consolidadas y de otras que están empezando, entremezclando desde los clásicos monólogos hasta sesiones de payasas, espacios musicales y confesiones de una sexóloga; todo ello con el feminismo como punto de encuentro.

Las primeras que se subirán hoy al escenario serán "Las coños", que narrarán la historia de la "Psicowoman", una psicóloga, sexóloga y youtuber que es, en resumen, "una gran friki de los coños que al sistema heteropatriarcal no le interesa que tengamos".

Por su parte, Alicia Murillo reflexionará, recién llegada a sus 40 años, sobre "una grieta que siempre ha estado en su camino" y que no es otra que su vulva.

Pamela Palenciano pondrá en escena el monólogo "No solo duelen los golpes", que propone, desde una experiencia personal en la que vivió maltrato y abuso, una mirada al tipo de relaciones que se mantienen "en el marco del patriarcado".

También hay lugar en el festival para el racismo que sufren las mujeres, un tema que abordará Silvia Albert en un espacio "No es país para negras"; además de un lugar para debatir sobre el mito del amor romántico, de mano de "Las XL" y su montaje "Amor sin fin".

El broche del encuentro lo pondrán las "Penkoletas Sisters", con un concierto de música electrónica y humor, donde tres hermanas indomables y descaradas vienen a tomar el escenario con sus letras de "lenguas imberbes".

Todas ellas protagonizarán la segunda sesión de este festival, que en su primera cita en la capital recibió una respuesta "espectacular" del público.

"Ello demuestra que hay necesidad de traer otros tipos de humor, que no sea el de siempre y que sea social", abunda Sitja, para matizar que en sus encuentros siempre hay dos opciones infantiles ("Teatro sobre ruedas" y "Me sobra la mochila"), para que los pequeños también aprendan que otra conciencia es posible.

Coñumor nació, agregan, con la intención de ser un festival itinerante, para que todo el país acceda a este humor feminista, y con vocación de mantenerse gracias a las administraciones públicas, porque "las humoristas también tienen derecho a hacer feminismo con dinero público".

El escenario donde actuarán las artistas en Rivas está coronado por tres ilustraciones que, con humor, representan a tres emblemas del feminismo: Clara Condemor (el álter ego de Clara Campoamor), Don Simone de Beauvoir (bebiendo con pajita de un tetrabrik de vino), y Rigoberta Menchú (simulando un estornudo y siendo contestada con un 'Atchús!').

Apoyadas en esas grandes figuras, estas humoristas animan a todos los madrileños a asistir a "chochos charlas", sus monólogos, sus comedias dramáticas y sus espectáculos musicales, entre otras propuestas donde el humor será el arma que usarán para mantener viva la lucha feminista.