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Atentos a lo que ha pasado en Ceuta porque es una prueba más del bloqueo de Sánchez a cualquier acuerdo con el PP. Ha cerrado cualquier vía de diálogo con Feijóo y también ha prohibido que se negocie en territorios en los que cabía la posibilidad de entenderse entre los dos grandes partidos. Por eso es noticia Ceuta.

Desde 2001, en la Ciudad Autónoma gobierna el PP. El presidente, Juan Jesús Vivas, volvió a ganar las elecciones el 28 de mayo, pero se quedó a cuatro escaños de la mayoría absoluta. En Ceuta, la relación entre PP y Vox ya se tornó en imposible durante la pasada legislatura. De hecho, Vivas gobernó con el apoyo externo del PSOE. Ahora habían planteado ir incluso más allá.

Y el PSOE ceutí lo tenía claro. Querían entrar en el propio Ejecutivo asumiendo varias consejerías. Y así lo apuntaba hace seis días el secretario general del PSOE de Ceuta, Juan Gutiérrez. Pero en las últimas horas todo ha dado un giro de 180 grados. ¿Qué ha ocurrido? Que Ferraz, la dirección nacional del PSOE, ha llamado a capítulo a sus compañeros de Ceuta. No caben acuerdos con el PP. "Qué es eso de dejar gobernar a la lista más votada. Ya estáis dando marcha atrás".

Y ha tenido que salir el líder del PSOE en la ciudad autónoma, esta vez vía comunicado, en el que se intuyen las orejas gachas, para reconocer que de lo que estaba ya casi cerrado, de lo que era su opción prioritaria, nada de nada. “En la actualidad no hay ni puede haber un pacto de Gobierno con el PP de Feijóo. No es momento de pactos”. Esto literal. Prefiere ahondar en la polarización, en apoyarse en extremos y separatistas, los ha situado en la única opción del PSOE para gobernar, antes que consolidar acuerdos con partidos constitucionalistas.

Pues así las gasta Sánchez. Boicot a cualquier acuerdo con el PP, aunque sea en Ceuta, que por otro lado no deja de ser una ciudad con un papel relevante por su situación estratégica en el norte de África. Pues eso, no es momento de pactos, dicen. Es momento de vacaciones. Que se lo digan a Sánchez.

PP y Vox llegan a un acuerdo en Aragón

Pero hablando de pactos. En las próximas horas está previsto que se firme el acuerdo entre PP y Vox en Aragón. Es una de las tres comunidades cuyo Gobierno sigue en el aire tras las elecciones del 28 de mayo.

Jorge Azcón, del PP, será presidente aragonés con el apoyo de Vox que entra en el Ejecutivo con dos consejerías, una de ellas con rango de vicepresidente. Esto, ya digo, todavía no está firmado, pero sí cerrado.

No era la primera opción del PP. Azcón ganó las elecciones por una amplía distancia respecto al PSOE pero le faltaban 6 escaños para la mayoría absoluta. El resultado del anterior alcalde de Zaragoza fue muy notable en su apuesta para llegar al Gobierno de Aragón. Sacó más de 100.000 votos de los que obtuvo el PP en las elecciones de 2019 y un aumento de 12 escaños. Por eso entendía que tenía que gobernar en solitario con el apoyo de Vox.

Esto es de hace 20 días y es la prioridad que ha mantenido Azcón durante toda la legislatura. Pero Vox se ha cerrado. Nada de acuerdo programático. O entramos en el Gobierno o se repiten las elecciones. Y ante ese callejón sin salida, en el PP han optado por incorporar a los de Abascal al Gobierno. Asumirán dos consejerías. La de Despoblación, Desarrollo Territorial y Justicia, con rango de vicepresidencia. Y la de Agricultura y Ganadería.

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Pues esto es lo último en Aragón. Acuerdo cerrado a falta de firmar.

7 de septiembre en Murcia

Donde no hay acercamientos es en Murcia. Allí está en marcha la cuenta atrás. Falta apenas un mes. Si antes del 7 de septiembre, víspera de la fiesta de la natividad de la Virgen María, no hay acuerdo, habrá repetición de elecciones.

En Murcia la distancia entre PP y Vox es enorme después de aquella moción de censura, en la que tres parlamentarios díscolos de los de Abascal se alinearon con el PP en contra de la dirección de su partido. Fueron expulsados, pero las heridas siguen abiertas.

Y mientras, Navarra...

De Navarra ya te hemos contado las novedades. Aquí los de Geroa Bal, que son la marca del PNV en la Comunidad Foral, le han echado un pulso a la socialista María Chivite. No les convencía ni el número de puestos ni tampoco las carteras asignadas.

Eso empujaba al PSOE directamente hacia Bildu. Tampoco es que le hicieran muchos ascos. Total, los socialistas dependen de su abstención en Navarra y Sánchez cuenta con Otegi para sacar adelante la investidura en el conjunto de España. Y Bildu sigue pensando en arrebatar a UPN la alcaldía de Pamplona vía una moción de censura.

En las últimas horas, los socialistas han mejorado la oferta para que los nacionalistas vascos les apoyen en la comunidad foral. Una vez que está abierto el mercado persa, qué más da. Los de Geroa Bai no dan nada por cerrado y dicen que se lo están pesando. Da igual. De una forma u otra, habrá acuerdo en Navarra. Hay pocas dudas.

A dos semanas de constituirse las Cortes

Y luego la incertidumbre sigue abierta en el conjunto de España. Se siguen produciendo contactos, continúan acercándose a Junts, y el ministro Bolaños les ha pedido incluso que bajen el pistón. Lo del referéndum y la amnistía, así, para empezar no lo pueden aceptar.

Aquí la primera prueba de fuego la tienen el día 17. Dentro de dos semanas se constituyen las Cortes; también la presidencia de la Cámara y la composición de la mesa. Esto es relevante. El presidente del Congreso es el árbitro, el que organiza y controla los tiempos.

En este procedimiento es importante recordar el reglamento. Hay una primera votación. Si ningún candidato obtiene mayoría absoluta se va a una segunda votación. Aquí ya solo acuden los dos diputados más votados en la primera. Y quien tenga más votos, será el presidente. Para que al PSOE le salga la suma, en ese momento, ya tiene que tener cerrados todos los apoyos del nuevo Frankestein 2.0, con el apoyo de Puigdemont. Esto, siempre y cuando PP y Vox se pongan de acuerdo.