Las familias de la Región de Murcia están preparando ya las comuniones para el mes de mayo y haciendo cuentas por el elevado desembolso económico que supone. Y es que la asociación de consumidores Consumur calcula que este año el gasto de las comuniones se va a incrementar en un 25% con respecto al año pasado.

Los mayores costes están en la celebración del banquete y en el traje de comunión. El estudio más reciente de la Asociación Consumur señala que la media de gasto en una comunión es de cinco mil euros, la horquilla se mueve entre los 2.500 y los 12 mil euros. Por ello, desde esta asociación de consumidores ofrecen una serie de recomendaciones, para ajustar el presupuesto que tengamos lo mejor posible. La principal es firmar un contrato con el salón de celebraciones, por el desembolso económico que conlleva un banquete.

Formalizar un contrato

Y es que hay muchas familias que no formalizan un contrato como tal, y que lo dejan en un acuerdo verbal, y luego no tienen forma de reclamar si surge algún problema. Desde Consumur indican que en ese contrato deben figurar todos los servicios que se incluyen. Además del banquete, en el que hay que incluir el número de comensales, se debe indicar otros servicios como la animación para niños, la decoración, o si hay hinchables, entre otros. En él, debe quedar indicado el precio de cada uno de los servicios, lo más detallado posible”.

Así lo ha indicado en COPE la responsable de comunicación de Consumur. Belén Rodríguez ha explicado que “es importante dejar todo por escrito para luego poder reclamar, si el servicio no se presta tal y como nos habían indicado o cambia en algo el menú y no nos han avisado, o algún servicio resulta insatisfactorio”.

El segundo consejo es pedir siempre factura de lo que hemos pagado. Belen Rodríguez dice que “lo que nunca hay que hacer es pagar en mano y quedarnos sin justificante”.

Traje de comunión

El traje de comunión supone también un importante gasto. En el caso de las niñas puede ser de unos 500 euros, en el de los niños es algo menos. En cualquier caso, desde Consumur recomiendan “comparar precios en diferentes establecimientos, ya que puede haber mucha diferencia”. Tanto si se adquiere el traje en una tienda física, como online, hay que comprobar que la talla sea la correcta, que se tomen las medidas adecuadas, y que el resultado sea el deseado. Aquí suele estar la principal reclamación, en que “se paga una reserva y luego no nos dejan el traje con las medidas adecuadas, tal y como habíamos pedido”.

Un consejo para reducir gastos de la comunión en este sentido es “alquilar el traje en vez de comprarlo”. Belén Rodríguez asegura que “esto ya se está implantando en muchas ciudades, y además de una cuestión económica es también una cuestión de sostenibilidad”.