Los regantes de Extremadura respiran aliviados tras dos campañas con escasez de agua. Las lluvias de los últimos meses van a permitir que haya agua garantizada para los cultivos con vistas a los próximos años.

Casi todo el regadío extremeño está modernizado, con la última tecnología, y en una situación “muy buena, de las mejores de España”, según ha apuntado en COPE Francisco Sánchez Bautista, presidente de la asociación de comunidades de regantes de Extremadura (Regantex).

Hay datos a tener en cuenta: el regadío supone el 6,4 por ciento del PIB extremeño, casi un 40 por ciento de la población extremeña depende de él y más del 34 por ciento de las exportaciones de la región procede del regadío.

Francisco Sánchez, a preguntas de COPE, sobre la posición de la UE en torno a la financiación de regadíos y cultivos excedentarios como la uva -cada vez se consume menos vino tinto-, afirma que las comunidades de regantes no deben entrar en los diseños de los cultivos, porque, entonces, empiezan los “problemas” y añade que en Europa consideran que “los cultivos emanan de algo que no necesita agua”, cuando el rendimiento del regadío está muy por encima del secano.