Mañana miércoles los valores diurnos subirán y serán significativamente altos - con avisos amarillos - en buena parte del país. Se podrán superar los 35 grados en muchos puntos del interior peninsular, sobre todo en los Valles del Ebro, del Tajo y del Guadalquivir, y también en Baleares. Hasta los 40 grados llegarán en la Ribera del Ebro de Zaragoza, donde ese aviso por calor intenso será incluso naranja.

En el lado contrario, las temperaturas bajarán en Canarias con máxima de 22 grados en las Palmas de Gran Canaria, valores similares a los de Santander o A Coruña.

Precisamente en Galicia, sobre todo en el noroeste, tendrán mañana los cielos más cubiertos de todo el mapa. Aun así, también se esperan intervalos nubosos en el norte de las Islas Canarias y en el litoral Cantábrico y, aparte, nubosidad de evolución en el nordeste con algún chaparrón tormentoso en los Pirineos.