En Oído Cocina hablamos con Jean-François Ott, propietario y director de Domaines Ott, productora de los mejores vinos rosados del mundo.

Domaines Ott es internacionalmente conocida por su vino Château de Selle, la máxima expresión de esta exitosa familia provenzal y su finca más antigua, que perteneció a los Condes de Provenza en el Siglo XVIII y fue adquirida por Ott en 1912. En 2004 la mayor parte de las acciones de Domaines Ott fue adquirida por la Maison Louis Roederer, que en 2009 puso al frente de la empresa al propietario y actual director Jean-François Ott.

Los rosados provenzales son vinos apreciadísimos hoy en día, pero no siempre ha sido así. Jean-François Ott recoge la larga tradición familiar que viene de su bisabuelo Marcel, que llegó de joven al sur de Francia y acabó triunfando con los vinos rosados, aunque al principio quisiera plantar viñedos de uva blanca. Hoy es él quien dirige el negocio familiar junto a su primo y el que está al cargo de la bodega. El consumo de rosado ha crecido un 20% en todo el mundo en las últimas décadas. Recientemente la bodega Domaines Ott ha recibido varias distinciones y reconocimientos internacionales como en los Decanter World Wine Awards.

La familia Ott se estableció en la Provenza en 1896. Por entonces, el bisabuelo Marcel Ott, de aquella un joven ingeniero agrónomo, tuvo que afrontar los daños de la epidemia de filoxera que arrasó las vides de la zona. Su labor entonces fue replantar fincas de enclaves privilegiados con cepas de gran calidad. Jean-François Ott tira de los recuerdos para valorar cómo el cambio climático está influyendo directamente en la producción de sus vinos.