Estamos en vísperas de uno de los días grandes de las fiestas navideñas, el del sorteo de Navidad. Mañana volveremos a ver esas imágenes de alegría, de brindis e incluso de llanto de aquellos agraciados con el Gordo o los primeros premios.

Son imágenes que, aunque repetidas, no cansan al mostrar el júbilo de los que ven cambiar su vida, aunque muchos de los agraciados sigan con su vida ordinaria, su trabajo, sus aficiones...

En 'Mediodía COPE',  David Eimil, propietario del Bar Carcudo en Lugo que el 22 de diciembre de 2017 repartió el premio gordo, el 71.198, contaba como algunos de los agraciados "se han comprado casa, coche, pero la mayoría de la gente sigue igual". Lo que sí han notado en el Bar Carcudo es que han vendido más lotería que hace un año, "ha venido gente de Asturias, Orense, Vigo, han venido de Bilbao, Santander. En seis días vendimos el número completo". Una de las costumbre de este establecimiento es "elegir la misma terminación todos los años, pero cambiamos el número. Pedimos que acabe en 8 y el que nos den".
 

El 71.198 también fue vendido en Málaga, en la administración La Viznaga, su propietaria Lina Durán ha notado como desde que dieron el Gordo, "este año ha venido más gente, gente que estaba de vacaciones y venido expresamente a comprar a nuestra administración".

Recuerda Lina como la suerte estuvo muy repartida y tocó a muchos vecinos del barrio que conoce, "algunos se han comprado coche, pero la gente sigue con su vida aunque si se les nota más desahogados".

Tanto el propietario del Bar Carcudo como la dueña de La Viznaga esperan volver a repartir suerte mañana, 22 de diciembre y que, como hace un año, sean muchas personas las agraciadas para que vean mejorada su vida.