El mundo sigue mirando a Turquía y a Siria donde los dos fuertes terremotos registrados en las últimas horas dejan ya más de 5.000 fallecidos entre los dos países, aunque se prevé que esta cifra sea mucho mayor, de hecho, la Organización Mundial de la Salud, la OMS, teme que supere las 20.000 víctimas mortales.

Además, hay más de 20.000 heridos y las réplicas no cesan, más de 300 se han registrado en las últimas 24 horas.

La situación es muy complicada para los equipos de rescaste que trabajan contrarreloj tratando de localizar y rescastar a los desaparecidos que son muchísimos. Cada hora que pasa, cada minuto que pasa, se reducen las posibilidades de encontrar personas con vida bajo los escombros a lo que han quedado reducidos miles de edificios. No son trabajos fáciles por las condciones que hay ahora mismo, con mucho frío y nieve también en algunas zonas.

En Turquía han sido rescatadas hasta el momento más de 8.000 personas. El colaborador de COPE, Mikel Ayestarán, se encuentra en la ciudad turca de Adana y nos ha contado la satisfacción de esos rescatadores cuando se produce el milagro y bajo los cascotes encuentran una vida, como cuando eran localizados una madre y su bebé después de 29 horas bajos los escombros.

España ya ha enviado a Turquía dos aviones del Ejército del Aire con equipos de ayuda y más de 90 efectivos entre bomberos y miembros de la Unidad Militar de Emergencia.

El ministro de exteriores, José Manuel Albares, también ha dicho que mandarán un hospital de campaña con 70 profesionales sanitarios, más voluntarios desde distintos puntos de España que están viajando a los dos países, a Turquía y a Siria para ayudar en todo lo que puedan. Ayer, por ejemplo, hablábamos con Luis Felipe Sandez, un bombero de Huelva que nada más conocer la noticia, decidió con varios compañeros viajar hasta la zona sur de Turquía.

Sabemos que Luis Felipe y sus compañeros ya están trabajando sobre el terreno, pero ha sido imposible ponernos en contacto con ellos. En muchas zonas turcas, las comunicaciones están totalmente caídas.

Mejor suerte hemos tenido al contactar con Alepo. En esta ciudad Siria está una comunidad de Misioneros Salesianos que desde ayer acogen a 300 personas que tuvieron que dejar sus casas tras el terremoto por miedo al derrumbe de los edificios como llevan contado en los distintos programas de la Cadena COPE, misioneros como Alejandro León.

"Hay mucho miedo"

El padre León en Mediodía COPE nos tranquilizaba al responder que todos "se encuentran bien dentro de lo que cabe", dentro de la enorme tragedia que están viviendo. Porque ahora mismo, "hay miedo, mucho miedo, pánico porque las casas crujen" y no paran de sentir todas las réplicas de los dos grandes terremotos, "sentimos los dos primeros terremotos, pero el resto de réplicas también. Parece que hay una tregua, un poco de sol y la mitad han ido a sus casas a ver cómo está la situación a ver si pueden volver a casa y esta noche o seremos menos o seremos muchos más", dice al hablar de las 300 personas que se han refugiado en la casa de la comunidad de salesianos de Alepo.

"Hay mucho miedo, hay pánico general y las réplicas ayudan a generar este gran miedo, la esperanza de encontrar a gente con vida se va apagando", repite el padre Alejandro León que pide ayuda para que los refugiados en su comunidad tengan al menos condiciones dignas para dormir, "hay que buscar para la comida, para darles una forma de dormir dignamente, hay solidaridad y agradecemos a todas las personas de cualquier parte del mundo que nos puedan ayudar. Desde España pueden enviar la ayuda a través de Misiones Salasianas".

Lo que más se necesita son colchones y "después ayudarles a reconstruir sus casas. Les pedimos oraciones", concluye el misionero salesiano.

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