En un par de semanas se disuelven las cortes y los partidos aprovechan para colocar eslóganes en las cámaras. Estamos en precampaña, por si no fuera suficiente con la Semana Santa que nos espera. Lo hemos visto esta mañana en el congreso, en la sesión de control al gobierno, la penúltima… y sí... ha salido a relucir el colchón de la Moncloa… el que cambió Pedro Sánchez nada más llegar…la frívola confesión en su libro, Manual de Resistencia, que presenta mañana y en el que, por ejemplo, también deja ver lo que sería una relación de complicidad con el Rey Felipe VI… llega a reproducir conversaciones… he de confesar que no he leído el libro de Sánchez pero por lo que ha trascendido del mismo no parece un libro propio de un presidente de Gobierno, cierto que sólo lo ha sido 8 meses, ni por el contenido ni por la forma… en seguida damos cuenta de cómo ha sido la sesión de control, toda la oposición contra Sánchez, y especial tira y afloja dialéctico entre el presidente y los líderes del PP y de Ciudadanos…

Elecciones el 28 de abril, unos comicios a los que Sánchez llegará, por ejemplo, con contradicciones en materia de migración. Atrás quedó la imagen del Aquarius atracando en Valencia con 600 inmigrantes rescatados en el mediterráneo. Ningún país dejaba sus puertos, España, Sánchez, recién estrenado, dio el paso al frente en lo que ahora se constata una operación de márketing porque el Opearms y el Aita Mary, barcos de ongs que rescatan personas en el mediterráneo, están desde hace mes y medio bloqueados en puerto… no les dejan zarpar…ahora no interesa la imagen. Los movimientos migratorios siempre han existido y siempre van a existir porque todos tenemos derecho a buscar una vida mejor… el pasado año España fue la principal vía de entrada de inmigrantes en Europa, según datos de frontex, de la UE, lo hicieron 56 mil 900, por la ruta del mediterráneo occidental, la que parte de las costas del norte de África.  El reto migratorio sigue siendo una asignatura pendiente y sería bueno que se abordara, dentro de su complejidad y fuera de operaciones de márketing de uno u otro signo.