Sánchez dispuesto a cambiar la ley de enjuiciamiento criminal

La última propuesta oficial por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al independentismo para intentar que Puigdemont dé el sí definitivo a la amnistía pasa por un cambio en la ley de enjuiciamiento criminal.

El presidente del Ejecutivo ha asegurado en una entrevista en televisión que el cambio está justificado ante "instrucciones que se prolongan y que incluso los propios fiscales han puesto en cuestión, que hay elementos que podemos incorporar de mejora y que, evidentemente, pueden subsanar algunas de las dudas que puedan tener estas formaciones políticas".

El cambio que plantea Sánchez serviría para acortar los procesos de instrucción en España, aunque no está claro si podría beneficiar o no a Puigdemont.

En busca de esa salida a la amnistía, la apuesta por limitar el tiempo de las instrucciones judiciales y ante todo quién debe decidir sobre las mismas, supone un aviso directo a jueces como Manuel García Castellano o Joaquín Aguirre, en el punto de mira de los separatistas.

La nueva reforma de la ley de en enjuiciamiento criminal otorgaría mayor papel decisorio a la Fiscalía sobre el juez instructor de turno. Un elemento de mejora, según lo ha definido Pedro Sánchez, para contentar a sus socios.

La gran paradoja en ciernes es que su gobierno retocó en 2020 la legislación para dejar en manos de la judicatura los plazos de instrucción y ahora se abre a recuperar la modificación introducida desde el Ejecutivo de Mariano Rajoy en 2015 a favor del Ministerio Público y que combatió el mismo PSOE.

Sin embargo, el paso atrás debería satisfacer a Junts como salida al callejón en el que ahora se encuentran para avalar la medida de gracia en su actual redacción. Hay margen para la creatividad, han venido deslizando los socialistas tras descartar modificaciones en la tipificación de terrorismo del Código Penal.