Desde tu teléfono, pasando por la televisión, por el router, hasta tu nevera, el aspirador o las bombillas conectadas a Internet. Todos estos aparatos están recopilando constantemente información. Información tuya y de tu familia. Y no solo eso. La comparten entre ellos.

¿Para qué? Porque se pueden saber muchas cosas: lo que ganamos, lo que nos gusta, cuántos vivimos en casa, la relación que tenemos entre nosotros, si hay amigos en casa, quiénes son, el tiempo que pasan en ella.

Un estudio internacional en el que han participado el Instituto Madrileño de Estudios Avanzados, la Universidad Carlos III de Madrid y otras universidades y centros de investigación de Estados Unidos y Canadá, ha alertado sobre las “alarmantes” amenazas que esto supone para nuestra privacidad y también para nuestra seguridad.

Dos de los autores del estudio han estado en 'La Tarde', el doctor Narseo Rodríguez Vallina, que es investigador del IMDEA Networks, y Juan Tapiador, catedrático del departamento de informática de la Universidad Carlos III de Madrid, y han explicado las conclusiones del estudio.

¿Cuáles son esos dispositivos en concreto que nos siguen la pista?

Cada vez son más las personas que deciden comprar un asistente virtual, los móviles que casi todos tenemos, las tabletas, ordenadores, pero ahora también están los dispositivos que nos ayudan a limpiar o regular las luces y cada día siguen saliendo más y más aparatos tecnológicos que nos ayudan con las tareas del hogar. Los expertos aseguran que "cualquier dispositivo conectado a internet" recopila datos de nuestro consumo, comportamiento, hábitos y preferencias.

"Se conectan entre sí"

Una de las conclusiones de este estudio han sido que estos dispositivos se conectan entre sí, y, por tanto, los datos se comparten entre todos, aportando más riqueza a nuestro perfil de consumo. "Necesitan descubrir cuál es tu punto de acceso a wifi, y estas comunicaciones están poco aseguradas. De manera que un dispositivo puede descubrir a otros dispositivos que están en esta red. Y esta información es valiosa", así ha explicado Juan.

¿Quién recopila toda esta información?

Al ser un ecosistema relativamente nuevo, es complejo definir o apuntar a personas físicas como las responsables de almacenar estos datos. Se trata, más bien, de grandes empresas tecnológicas. "Son, fundamentalmente, empresas que viven de la comercialización de datos con fines estrictamente comerciales, de posicionamiento de anuncios, por ejemplo", apuntaba Narseo.

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Y añadía que, por ejemplo, en los bombillos inteligentes "sí puede ser el sistema operativo quien esté obteniendo esta información", pero explicaba que el mayor riesgo descubierto en el estudio "ocurre cuando instalamos aplicaciones de terceros en plataformas como televisiones inteligentes o altavoces inteligentes o incluso aplicaciones móviles".

Reconocen un hogar entre millones

Los expertos han explicado que tener tantos dispositivos inteligentes conectados entre sí, pueden reconocer y diferenciar cada casa de un lugar, del resto. "Las aplicaciones son capaces de darse cuenta si estás en el mismo lugar, de identificar el usuario, el objeto, para poder construir una historia de su consumo y su perfil".

¿Cómo podemos protegernos?

"En cierta medida no podemos protegernos del todo", aseguran los expertos, puesto que estos protocolos que utilizan las aplicaciones tienen cierta funcionalidad y a día de hoy no hay una regulación que nos proteja por completo. "Lo que abogamos en el estudio es porque haya cierto mecanismo de control o de certificación de los dispositivos antes de ponerlos en el mercado, y también que los estándares de red que definen cómo deben comportarse esos protocolos, tengan una visión más respetuosa con la privacidad y la seguridad de los usuarios".