Mientras el pasado 1 de enero, en Occidente, dimos la bienvenida a 2020, el próximo sábado 25 de enero, en China, comenzará el año 4.718. Este año, que finalizará el 21 de febrero de 2021, es el de la Rata de Metal y una de las celebraciones tradicionales más importantes de esta comunidad. Por mucho que esta celebración nos suene lejana, no lo es tanto. La población de chinos que vive en España se ha multiplicado por 16 en una década, llegando hasta los 200.000 según el Instituto Nacional de Estadística, sin contar los 600.000 que nos visitan cada año. 

Sin embargo, esta celebración tendrá un punto negro, en lo que llevamos de año se han confirmado tres asesinatos de chinos. El último, un joven de 23 años, que presentaba varias puñaladas en el tórax. Una noticia que a Julia Zhang, presidenta de la Fundación Orient, asociación dedicada a mejorar la integración de los chinos en España, le llegó al corazón. Julia nos acerca su preocupación sobre esta situación y pide una mayor seguridad pero también nos acerca su cultura, sus costumbres, y la convivencia con el resto de la población china en España. 

Uno de los chinos que ya lo tiene todo a punto es Rubén Wang. LLeva casi 30 años en España y está tan enamorado de nuestro país y en concreto de la cocina Asturiana que en 1998 abrió un restaurante, y no de comida asiática, sino asturiana. Rubén celebrará con sus compatriotas esta fiesta que tiene más de 4.000 años de historia, y que comienza con el ciclo del cultivo, despide al invierno, y da la bienvenida a la nueva estación. De ahí que también se le denomine el Festival de la Primavera. 

Y no será el único porque también conocerás cómo lo viven los cristianos chinos en España. Cada domingo tienen una misa a las nueve y media de la mañana. Sí, muy temprano, para que luego puedan ir a trabajar. La oficia el sacerdote Pedro Liu en una parroquia del barrio madrileño de Usera.