Bildu le ha enturbiado el encuentro con Biden a Sánchez. Y la campaña del 28-M. La incorporación en las listas de Bildu de 44 condenados por terrorismo, siete de ellos por asesinato, está siendo uno de los hándicap electorales del presidente del Gobierno.

Hasta siete candidatos y suplentes sentenciados a largas penas de cárcel por su participación en varios asesinatos cometidos entre 1978 y 2001 sonahora aspirantes en las listas a las elecciones municipales de Legutiano (Álava), Erregil e Irun (Gipuzkoa), Maruri-Jatabe, Mungia y Zierbena (Bizkaia), y Berrioplano (Navarra).

PINCHA PARA LEER: Carlos Herrera: "Viendo las listas de Bildu, ¿se les puede llamar etarras sin que nos llamen la atención?"

Legalmente etarras que ya han cumplido sus penas pueden presentarse a un cargo público, otra cosa es la "consideración moral", tal y como ha advertido Guillermo Vila, en La Mañana Fin de Semana. Pero además en esta aserción, hay matices.

La ley de partidos vs ley electoral

Sobre la mesa se encuentran dos normas que "podrían violar las candidaturas". Por un lado, recuerda Vila, está la ley de partidos que establece que un partido puede ser ilegalizado si incluye en sus listas a condenados por terrorismo que no hayan rechazado públicamente la violencia.

Y por otro está la ley electoral, que impide que se presenten candidatos con condenas de inhabilitación pendientes, cuestión que ya estudia la Fiscalía de la Audiencia Nacional. Es decir, si los terroristas que se presentan han cumplido íntegramente las penas y pueden ejercer un cargo público.

¿La ley puede impedir la presencia de etarras en las listas?

Para el experto penalista Emilio Cortés, la ley electoral sería una herramienta legal que podría impedir la presencia de etarras en las listas. "Si la pena de inhabilitación para el sufragio pasivo que acompañe a la pena privativa de libertad por el delito de terrorismo, no se ha cumplido definitivamente, está claro que estas personas no pueden concurrir al proceso electoral porque tienen que seguir cumpliendo esa pena hasta que se extinga".

Respecto a la Ley de Partidos Políticos, Cortés insiste en un matiz. La norma, deja claro que "no se pueden incluir personas que hayan sido condenadas por delitos de terrorismo, pero dice regularmente, es decir que el partido político de forma frecuente lo haga".

Recuerda que en las anteriores elecciones Bildu ya presentó "aproximadamente a 14 -ahora estamos en 44- y desde luego si la cuestión se estimulara a nivel judicial, habría que ver si esas dos golondrinas hacen verano y si con esos precedentes ya podemos entender que se esté produciendo de forma regular la presentación de candidatos con antecedentes terroristas".

Ahora, insiste el experto penalista, "todas las instituciones que están inmersas en el proceso electoral tendrán que ser las que digan si las penas están cumplidas, no es algo que sea opinable, -aunque pueda ser muy debatible-, las penas o están cumplidas o están pendientes de serlo", ha zanjado en La Mañana Fin de Semana.

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Ilegalizar Bildu o expulsar a sus candidatos

Esta misma semana el grupo parlamentario de Vox registraba una propuesta en el Congreso para instar al Gobierno a solicitar la ilegalización de EH Bildu por incluir a condenados por terrorismo en las candidaturas para las elecciones del próximo 28 de mayo. Según el partido de Santiago Abascal, la incorporación a las listas electorales de condenados de ETA incumple de "forma grave" la ley de partidos.

Y es que precisamente, la única opción para evitar a terroristas en las listas electorales de Bildu, es ilegalizar el partido. "La ley de partidos no prevé un mecanismo de expulsión de esos terroristas, lo que establece es un sistema para suspender o ilegalizar el partido político. Si se pudiera expulsar del sistema a esas personas por sus antecedentes, el debate sería menos traumático en su abordaje".

No podemos expulsar a esas personas por sus antecedentes terroristas

Los candidatos

Entre los aspirantes con delitos de sangre y en los primeros puestos de las candidaturas, figuran Juan Carlos Arriaga Martínez, número 3 en la de Berrioplano y condenado a 29 años de prisión por el asesinato en 1984 de Jesús Alcocer Jiménez, así como Begoña Uzkudun Etxenagusia, tercera en la de Erregil y condenada a 18 años de prisión por el asesinato de José Larrañaga Arenas, también en 1984.

Asier Uribarri Benito, por su parte, ocupa el puesto número 4 en la lista para el Ayuntamiento de Maruri-Jatabe. Fue condenado a 16 años de prisión como cómplice en el asesinato en 1997 del guardia civil José Manuel García Fernández.

Covite cita asimismo a Agustín Muiños Dias, "Tinin", número 6 en la lista de Legutiano, que fue sentenciado a 29 años de prisión por el asesinato en 1983 de José Antonio Julián Bayano, y a Juan Ramón Rojo González, en el puesto 21 de la candidatura de Irun, que fue condenado a 30 años de prisión por el asesinato de Francisco Gil Mendoza en 1991.

Son suplentes José Antonio Torre Altonaga, "Medius", en la lista de Mungia, condenado a 20 años de prisión por su colaboración en el asesinato en 1978 de Alberto Negro Viguera y Andrés Guerra Pereda, y Lander Maruri Basagoiti, en la de Zierbena, sentenciado a 16 años de prisión por su complicidad en el asesinato en 1997 del guardia civil José Manuel García Hernández.

Para Covite, "es una provocación más a las víctimas del terrorismo ver cómo la izquierda abertzale premia a estos asesinos por seguir orgullosos de su pasado criminal".

"Ninguna democracia digna, ningún Estado de derecho consciente del significado de sus víctimas del terrorismo permitiría que las puertas giratorias de los terroristas fuesen las de la política. Que estas personas puedan llegar a ocupar cargos públicos, como si no hubiesen supuesto una gravísima amenaza a la democracia en el pasado, es preocupante y decepcionante", ha afirmado la presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez.

Ha urgido a los responsables públicos "a garantizar unos mínimos principios políticos y éticos en los nombramientos de los integrantes de sus listas", pues destaca que "cualquier condenado por terrorismo, aunque haya cumplido su pena, debería estar obligado a repudiar públicamente su pasado criminal si quiere ejercer una función pública".

Además, critica a EH Bildu por "pretender disimular su simbiosis con ETA a la par que abarrota sus listas a las elecciones del 28-M de personas que pertenecieron a la organización terrorista y fueron condenadas por ello".

"Algunos incluso van en las listas con su nombre y el apodo que tenían en ETA, como es el caso de Agustín Muiños Dias, 'Tinin', y de José Antonio Torre Altonaga, 'Medius'", añade.