Tetiana lleva varios años integrando la Asociación de Hispanistas de Ucrania. Siempre ha vivido con la sombra de Moscú. Lo que ocurre ahora no es nuevo. En 1991, Ucrania se independizó. Se desintegró la Unión Soviética a través de un referendum el 1 de diciembre. La mayoría votó por ser independiente.

-¿Se llegó a eliminar por completo el control ruso?

R: No. Rusia temió perder el control sobre Ucrania. Por eso, durante 30 años seguían teniendo el control sobre las autoridades o algunos grupos políticos.

-¿Cómo fue la Revolución Naranja?

R: Fue en 2004 y la causa fue el fraude electoral. Cuando la mayoría optó por un candidato democrático, las autoridades nos dijeron que había vencido el candidato pro ruso. La gente se reunión en la plaza de la independencia para protestar.

-De 2004 a 2020. Ese año hubo otra gran protesta.

R: El Gobierno rechazó firmar el pacto de asociación con la Unión Europea, lo que anhelamos todos los ucranianos. Nosotros volvimos a salir a protestar. Estas manifestaciones duraron tres meses y acabaron con fusilamientos. Los francotiradores apuntaban a las personas sin armas.

-Rusia no acaba satisfecha. Triunfan las protestas e invade Crimea. ¿Es consecuencia directa?

R: A los soldados rusos les entregaron medallas con la inscripción de Crimea, 20 de febrero. En esa fecha, todavía seguían las protestas en las calles. Ellos ya sabían que les iban a condecorar.

-En 2014 invaden Crimea por la fuerza y luego llega la guerra en Donbass. ¿Cómo fue?

R: Tras Crimea, había grupos de separatistas en otras ciudades de Ucrania. Allí, lograron liquidar todos los organismos de las autoridades ucranianas y declarar la independencia.

-Ahora, ¿cómo está la región ocupada?

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R: Está bajo el control de Rusia. Tras la guerra que empezó en 2014, el ejército logró recuperar dos regiones.

-¿Cómo crees que será el futuro?

R: Venceremos si consolidamos todos los esfuerzos dentro del país, todos los partidos y grupos sociales, para hacer frente a Rusia. Con la ayuda de la Unión Europea, de nuestros socios de la Alianza Atlántica, como Canadá y Estados Unidos, nosotros venceremos. No sé de qué modo. Espero que sea pacífica.