Gonzalo Boye es acusado de blanquear y es que intentó recuperar 800 mil euros que habían sido intervenidos. Pablo Muñoz ha analizado la última hora sobre el caso en 'La Linterna'.

Después de cinco años se ha conseguido que entre en prisión porque la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha abierto un juicio oral, así que ya no puede librarse del juicio, y eso es clave. "Sito Miñanco si sigue encarcelado, pero porque en este tiempo el Supremo dictó una sentencia firme contra él de tres años y tres meses de cárcel por blanqueo", explica. Sin embargo, todos los miembros de su organización, como Arango o David Pérez Lago, el hijastro de Laureano Oubiña, están en la calle desde enero. A Sito Miñanco se le acusa de estar detrás de dos alijos, uno de cerca de 4 toneladas de cocaína que fueron incautadas en noviembre del 2017 a bordo del buque Thoran cerca de las Azores, y otro de 616 kilos que un mes después viajaron desde Colombia hasta Holanda en un contenedor.

"En cuanto a los delitos, se le imputa pertenencia y jefatura de organización criminal, blanqueo de capitales, reincidencia, utilización de medios sofisticados para entorpecer el trabajo policial y delitos contra la salud pública de extrema gravedad", subraya. Todo ello penado entre 15 y 18 años de cárcel.

Fue una persona adelantada en sus tiempos porque fue capaz de tener una red de contactos espectacular en Colombia, de modo que podía hablar de tú a tú con los narcos de ese país, pero es que además había extendido sus tentáculos a mafias mexicanas y búlgaras. Y segundo lugar, "sabía que tenía que invertir mucho dinero en el negocio para prosperar". Para defenderse de los pinchazostelefónicos de la Policía, fue el primero en utilizar teléfono móvil distinto para comunicarse con cada miembro de su banda.

En la operación Mito, por la que va a ser juzgado ahora, se comunicaba con teléfonos satelitales manipulados por dos técnicos holandeses especializados en móviles de la marca iPhone. Dominaban tanto los dispositivos que la propia empresa fabricante, Apple, los tentó a lo largo de la investigación con 30.000 euros al mes de sueldo para cada uno si cambiaban Galicia por Silicon Valley, pero lo rechazaron porque ganaban más con Sito.

Es interesante que el letrado había pedido el sobreseimiento, es decir, terminar un proceso por considerar evidente la irresponsabilidad del inculpado o por falta de pruebas. Sin embargo, la Sala de lo Penal asegura que los indicios que se describen en el auto de procesamiento impiden ese sobreseimiento.