El curioso origen de los 23 jugadores de un equipo de fútbol de Alicante: "El central pasó tres días en el mar sin agua y sin comida"
Expósito cuenta una idea que surgió en el barrio alicantino de Vistahermosa en 2019 y que ya ha llegado a otras localidades como Madrid, Málaga, Valencia y Canarias

Madrid - Publicado el
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Los miércoles de cada semana, a eso de las ocho de la tarde, un equipo de fútbol salta a entrenar al campo del Colegio Inmaculada-Jesuitas, en el barrio de Vistahermosa, en Alicante. “En apariencia es un entrenamiento normal, porque quien lo mire desde fuera verá a un grupo de chavales corriendo por el campo, haciendo paredes, chutando a portería... En definitiva, jugando al fútbol”, cuenta el director de La Linterna, Ángel Expósito.
Sin embargo, echando un vistazo más profundo, se puede comprobar que sobre ese césped de Las Cruces, se juega un partido mucho más importante, porque se trata del CEAR Club de Fútbol, el equipo que ha montado la Comisión Española de Ayuda al Refugiado.
El origen del central del equipo
Tiene una característica que destaca por encima del resto, que la gran mayoría de sus jugadores son personas refugiadas que han llegado a España empujados por la complicada situación que vivían en sus países de origen. Por ejemplo, el central del equipo, Yamal Elberreq, que llegó de Marruecos en 2022, tras una travesía por mar de tres días a bordo de una patera, como él mismo relata en COPE.

Plantilla del CEAR FC de Alicante
“El viaje fue una experiencia muy mala, estar tres días en el mar sin comida, sin agua, mucho frío”, explica. Es uno de los cerca de 20 jugadores que cada miércoles se enfundan la equipación y las botas y se ponen a competir. Lo hace en una de las ligas municipales de fútbol siete de Alicante, y este año han acabado en tercera posición y, lo que para él significa ser miembro de este equipo se puede definir en una palabra: “es como una familia”. “El deporte fue un lenguaje común entre nosotros a pesar de las diferencias de idiomas y fue una oportunidad para crear amistades, entorno seguro y acogedor”, confiesa.
La idea del CEAR CF de Alicante
Así, la iniciativa de formar un equipo de fútbol con jugadores que han llegado de situaciones de conflicto en el extranjero nace en 2019 en Alicante y funciona tan bien que el proyecto se expande a más ciudades. La Comisión Española de Ayuda al Refugiado crea un equipo en Valencia en 2021, en Madrid en 2023 y en Canarias y Málaga en 2024.
Uno de los centrocampistas del CEAR club de fútbol en Madrid, Mohammed, llegó de Sudán en 2023 y sabe mejor que nadie cual es el ambiente que se genera en un vestuario de esas características, como él mismo cuenta en La Linterna: “Somos unos 23 jugadores y llega un momento en el que acabamos siendo 23 nacionalidades diferentes”. Para Mohammed, el equipo es lo que le falta “a cualquier persona que haya salido de su país y esté buscando una nueva vida cuando te ves alrededor de otra gente que está pasando por lo mismo que tú, que sientes ese sentido de pertenencia”.
Mohammed es uno de los 23 jugadores, y como él dice, una de las 23 nacionalidades que se reúnen en ese vestuario cada día de entrenamiento. Está en el equipo desde el principio, es un apasionado del fútbol, y sabe lo que significa para sus compañeros poder apartar los problemas durante un rato cada semana, al menos el rato que duran los entrenamientos y los partidos.
“Lo ves en la cara, el primer día vienen, están estresados y tienen esa esperanza de poder encontrar algo que les guste hacer”, relata el joven. “Que disfruten como viene siendo el fútbol y cuando se enteran de lo que es el equipo, de lo bien que se pasa cuando estás en un entrenamiento, le ves el cambio en las expresiones de la cara, le ves todo”.
El objetivo de todo es transformar, aunque solo sea durante un rato, esos pensamientos tristes, esa expresión en la cara de los jugadores. “Se nos olvida todo, no pensamos en nada más, solo pensamos en jugar al fútbol, en divertirnos”, explica Mohammed a Expósito. “En mi caso, solo pienso en ver si el centrocampista se está subiendo mucho, si el de atrás está subiendo demasiado y se está dejando aquí en el fútbol, no pienso en “madre mía, a ver si encuentro un nuevo trabajo, si apruebo mis estudios, si mis padres van a volver a trabajar o si no”.
El entrenador
Otras historias de La Linterna
Hay una figura que tiene que estar al mando: el entrenador, que en caso del equipo de Madrid es Gonzalo Comendador. “Cuando me presentaron el proyecto, pues la verdad que me enamoré de él y estoy encantado en poder ser partícipe”, reconoce en La Linterna. “Hay que ser conscientes también de las características y el perfil de los jugadores, las edades varían entre los 18 hasta 23 años, si son personas que lleva o no mucho tiempo en España.”
Como en todo equipo o vestuario, hay unas normas por las que regirse. Algo así como unos códigos que siempre hay que respetar, aunque alguno cueste un poco más de la cuenta. “Unos criterios que son muy sencillitos son el compromiso y la asistencia a los entrenamientos, y que sea una familia y un espacio para ellos en el que se encuentren seguros, cómodos y la puntualidad la vamos trabajando durante toda la temporada”, aclara. “Yo pensaba que sí íbamos a tener la suerte de que fueran puntuales, pero seguimos trabajando en ello”, bromea.