"Puede costar 3.500 euros y aquí lo tienen por 50": una peluquera de Madrid tiene una bonita solución para la caída del pelo
'Are you ready?' es la iniciativa de Jess Rodríguez, que cuenta en La Linterna cómo puede ayudar a recobrar el autoestima tanto en hombres como mujeres

Madrid - Publicado el
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En el momento en el que un diagnóstico de cáncer irrumpe en una vida, todo se fractura. La mente se nubla con un torbellino de preguntas urgentes sobre tratamientos, pronósticos y efectos secundarios. Entre ese maremoto de incertidumbre, surge con frecuencia una preocupación íntima y profundamente humana: “Se me va a caer el pelo”. No es una cuestión vanal. La autoestima, esa aliada fundamental en la batalla contra la enfermedad, suele quedar herida con la pérdida de la imagen propia. Para miles de mujeres, dejar de reconocerse en el espejo es una herida más que suma al dolor del proceso.
Consciente de esta realidad silenciada, la peluquería Are You Ready? Hair Experience, situada en la céntrica Costanilla de los Ángeles de Madrid, se ha convertido en un faro de solidaridad y belleza para quienes luchan contra el cáncer. Su historia, contada en primera persona por su fundadora, Jess Rodríguez, en el programa ‘La Linterna’ de COPE, dirigido por Ángel Expósito, es un testimonio conmovedor de cómo un pequeño gesto puede devolver la normalidad y la sonrisa a quien más lo necesita.
La bonita idea de una peluquera de Madrid
Todo comenzó hace una década, entre tijeras y cambios de look. “En Are You Ready hacemos muchos cambios de look y entre ellos hay cambios que son bastante radicales, como por ejemplo cortar bastantes centímetros, 20 cm en una melena”, explica Jess. Fue allí, con esas melenas cortadas sobre el suelo de la peluquería, donde surgió la pregunta clave: “Decíamos, 'Jo, es que este cabello puede valer para hacer pelucas o postizos'”. Ese fue el germen. A raíz de entonces, investigaron y descubrieron Mechones Solidarios, una asociación a la que hoy están vinculados como uno de sus más de 2000 centros colaboradores en España.
El proceso es tan delicado como el propósito. La donación no vale cualquier cabello. Debe medir como mínimo 30 centímetros, no puede haber sido tratado con henna, las puntas deben estar sanas y el mechón en general tiene que encontrarse en buen estado. El origen de estas donaciones es de lo más variopinto y esperanzador: desde niños que “se sienten muy orgullosos de la labor que están realizando” hasta mujeres de entre 30 y 50 años, pasando por hombres que buscan un cambio de imagen y deciden que su gesto tenga una segunda vida.
De 3.500 euros a 50
Pero el verdadero milagro ocurre después. Jess detalla el meticuloso trabajo que sigue: “Como llega el cabello que nosotros mandamos, lo seleccionan por texturas, por colores, por largos, lo seleccionan si es cabello de niños… Todo bien seleccionado para que cuando una persona necesite una peluca personalizada, pues puedan tirar de ese cabello preseleccionado con las características del cabello que la persona tenía”. El objetivo último no es solo cubrir una cabeza, sino reconstruir una identidad. Que una mujer se mire al espejo y vuelva a ver un reflejo que le es familiar, que le pertenece.
El acceso a una de estas pelucas oncológicas, que en el mercado pueden alcanzar un valor desorbitado de entre 1.000 y 3.500 euros, se convierte, gracias a esta cadena de solidaridad, en un trámite accesible. Por apenas 50 o 100 euros, una persona en tratamiento puede obtener una peluca totalmente personalizada y confeccionada con pelo natural. Los criterios para optar a ella priorizan la necesidad: se deben presentar informes médicos y justificantes de renta que acrediten la imposibilidad económica de afrontar ese gasto en un momento ya de por sí crítico.

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La labor de Jess y su equipo ha sido pionera. “Nosotros somos la primera peluquería en Madrid centro que empezamos a colaborar y claro venían muchísimos, cinco donantes diarios”, recuerda con emoción aquellos primeros años, en los que llegaban a enviar unos 250 mechones solidarios al mes. El mapa de la solidaridad se ha ampliado y ahora son muchas más las peluquerías que se han sumado a la iniciativa, lo que ha diversificado las donaciones. “Como han ido multiplicándose las peluquerías solidarias a lo largo de toda España, ya son menos, para la semana es uno o dos donantes”, matiza.
Por suerte, los almacenes de Mechones Solidarios están hoy bien surtidos. Existe un stock de mechones de todos los colores, con canas, infantiles, lisos o rizados. Un preciado material en manos de expertos tejedores que, puntada a puntada, devuelven no solo el cabello, sino la confianza y la alegría a quienes más lo necesitan.
La historia de Are You Ready? Hair Experience, difundida en ‘La Linterna’, trasciende la anécdota para hablarnos de comunidad, de empatía y de la belleza de los pequeños actos. Es un recordatorio de que, a veces, la solución a un problema immense puede empezar con un simple corte de pelo. Un corte que, en lugar de acabar en el suelo, se convierte en la pieza clave para que una mujer vuelva a reconocerse y a sonreír frente al espejo.