A nadie se le escapa que según van pasando los años, sobre todo por encima de los 70, vamos perdiendo audición, pero ahora la OMS acaba de lanzar una alerta sobre lo anormal que empieza a ser la pérdida de audición en persona de 55 años o más.

Esteban Pérez Almeida, director médico de COPE, describe en La Linterna una situación muy significativa: “Pasados los años empiezas a tener un problema que lo notas cuando estás en un ambiente ruidoso, como en restaurantes bulliciosos, en donde notas como determinadas personas que están en medio de una conversación ponen sonrisa dentífrica y cara como de que atienden, eso sí, atienden, pero no se enteran, porque oyen ruidos aunque no escuchan la conversación”.

Esto tiene nombre y se llama Presbiacuasia o perdida de la audición asociada a los años: “Sería como la prima hermana de la Presbicia, que es la pérdida de visión, que puedes ver en ese mismo restaurante, en las personas que se tienen que alejar mucho la carta para poder leerla o que optan por sacar sus gafas de cerca”.

La alerta que nos deja la OMS este año está en relación con que esa perdida de audición, fisiológica con el paso de los años, se está adelantando unos 10-15 años. Se estima como para el próximo año 2050, unos 2.500 millones de personas estarán con algún problema de perdida de audición: “Esta cifra es casi como la población total que India y China tienen en la actualidad”, advierte el doctor.

Los factores que favorecen la pérdida de audición

Esteban Pérez Almeida destaca que, entre todos los factores que pueden incrementar la pérdida auditiva, hay uno que prevalece: “El de los traumas acústicos”. Nuestro sistema auditivo, genéricamente no está preparado para soportar todo aquello que esté por encima de 80 decibelios durante más de 40 horas a la semana. Al superar esta cifra, se empezaría a producir un daño acústico que, de prolongarse en las sucesivas semanas, meses y años, terminarían provocando la perdida de audición o la sordera, ya que daña de forma irremediable las células sensoriales del oído interno.

¿Cuánto son 80 decibelios? El experto pone algunos ejemplos: “La sala llena de un restaurante llega a los 80; el ruido de una motocicleta alcanza los 90 y la música en una discoteca a 100”. La Agencia Europea para la Seguridad y la Salud del Trabajo estima que entre el 25% y el 33% de los trabajadores en Europa están expuestos a un alto nivel de ruido, al menos durante una cuarta parte de su jornada laboral.

El objeto que usas diariamente y que “martillea tu oído”

El uso de los auriculares “literalmente martillean nuestro oído interno” siendo, sin duda, el problema de las próximas generaciones que, dentro de 10 o 20 años, empezarán a darse cuenta de aquello de que “escucho, pero no entiendo”. La revista British Medical Journal asegura que entre 670 y 1350 millones de adolescentes y adultos jóvenes en el mundo están en riesgo de perder audición por la exposición a estos auriculares durante tiempo prolongado.

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Cómo prevenir la pérdida de audición

Esteban Pérez Almeida desvela en La Linterna dos trucos muy sencillos para prevenir la pérdida de audición:

• Evitar ambientes que superen el límite de los 80 dB: “Tienes que tener en cuenta que si una persona tiene que esforzarse para hablar o ser escuchada por encima del ruido ambiental, eso es más de 75 decibelios”.
• Cuidado con los cascos: “Es importante tanto reducir el tiempo de escucha como no sobrepasar el 50% de la capacidad de volumen”.