Hay un viejo axioma que dice que cuando el enemigo o el contrario se equivoca, lo mejor es no despistarle y que siga a lo suyo. El PP y Vox, Vox y el PP no parecen hacer demasiado caso a esta frase.

Cuando mejor dan las encuestas, cuando el contrario, en este caso su 'Sanchidad' con Batasuna, con Esquerra Republicana, con los indultos, con un cambio de Gobierno completamente inútil y con sus socios, haciendo todo lo posible para hacer la puñeta, cuando todo se está confabulando, surge no sé qué persona non grata en Ceuta y se monta la parda.

De entrada, manda narices que Abascal sea persona non grata en cualquier parte de España, en una España en la que se cogobierna con Batasuna, en la que se hacen los presupuestos con Esquerra Republicana y en la que todos pagamos la fianza de los golpistas. Tiene tela.

Pero dicho esto, yo creo que Vox haría bien en medir su ofensa y el PP haría bien en no entrar al trapo. Se las están poniendo botando y están haciendo, una vez más, todo lo posible para no llegar al Gobierno.

Cuando el contrario se equivoca, lo mejor es no despistarle. Pues aquí, PP y Vox, Vox y PP parece que hacen lo contrario.

La ruptura de relaciones entre PP y Vox

Las declaraciones del presidente de Ceuta Juan Jesús Vivas en los micrófonos de 'Herrera en COPE' el pasado lunes tras la polémica votación en la Asamblea de la ciudad autónoma en la que se declaró a Santiago Abascal, con la abstención del PP, 'persona non grata' encontraron respuesta por parte de Vox.

La formación política dio por rotas las relaciones con el PP por considerarle "cooperador necesario" para que su líder Santiago Abascal fuera declarado el pasado viernes 'persona non grata' en Ceuta.