Ya sabes que hoy estamos encendiendo la Linterna desde Córdoba, desde esta ciudad espectacular con tanta historia. Pero es que si sales hacia el campo. El paisaje de los olivares andaluces impone. Si caminas entre ellos te da la sensación de cruzar un bosque sin final.

Pero es que la vista desde el aire es todavía más espectacular. De hecho los cultivos de Priego, Almedinilla, Lucena o Cabra aspiran a ser declarados Patrimonio de la Humanidad en 2023. Esta imagen es también la del trabajo de mucha gente de miles de familias que viven de este producto. Pero es una imagen que contrasta con este sonido.

Son las protestas del campo español, un sector que ha dicho basta. Las manifestaciones estaban previstas para dentro de unos meses, pero la brutal subida de los costes de producción las ha adelantado. En diciembre se espera una gran manifestación y el lunes el ministro Planas reunirá a los principales agentes de la cadena alimentaria. El sector del campo se une así a los transportistas porque son dos de los gremios más afectados.

A esta situación hay que sumar la falta de relevo generacional. El campo ya no es atractivo para los jóvenes. Son muchas horas de trabajo, el beneficio no está asegurado y muchas veces te ves obligado a endeudarte antes de empezar la temporada.

Por eso la protesta es generalizada, quieren hacerse notar. Se sienten olvidados...