La isla de La Palma acapara ahora las miradas de todo el mundo. Es una de las más jóvenes del archipiélago canario, ya que tiene apenas dos millones de años de edad geológica. Estamos ante un fenómeno excepcional, pero no nos olvidemos de que son islas volcánicas, se formaron con estas erupciones.

Los primeros indicios de la actividad volcánica que se tienen registrados se remontan a la Edad Media. Ya en el siglo XVI, se tiene constancia de que el volcán Tehuya, también en la Palma, estuvo expulsando lava durante 84 días... entre el 19 de mayo y el 10 de agosto de 1585. Y fíjate porque en Lanzarote el volcán Timanfaya, que es el único que aún sigue activo hoy en día en esa isla, protagonizó en 1730 la mayor erupción en Europa, 2055 días de actividad continuada.