Los toreros son una raza aparte. Este sábado en Arévalo (Ávila) el maestro Juan José Padilla resultó herido por una cornada que le arrancó parte del cuero cabelludo, y que se suma a la que en 2011 lo dejó sin ojo. Pese a ello, el torero se encuentra “bien” y está de alta hospitalaria, según ha confesado este lunes en 'Herrera en COPE'. “Somos conscientes del percance y también de la gloria. No todas las batallas se ganan”, ha dicho refiriéndose a su oficio.

Ya en casa, Padilla ha confesado que en el momento de la cogida sintió “una sensación desconcertante” ya que llevaba como “una boina de pelo” en su mano. Pese a ello, quería ponerse en pie para transmitir seguridad y confianza. “No estaba muy preocupado porque controlaba mis sensaciones”, ha explicado. “Si hubiera perdido la memoria o me asfixiara me hubiera preocupado mucho”, ha continuado.

El torero ha asegurado que esta cornada no interrumpirá su actuación en la feria de Sanfermines de este viernes, pues es su “plaza talismán”. “Este percance no va a impedir que esté”, ha afirmado con rotundidad.

El maestro también le ha querido transmitir su agradecimiento al equipo médico de la plaza de toros porque “se portaron fabulosamente”. Precisamente, a medida que se quitaba el traje le permitió hablar con su familia para tranquilizarla, ha rematado.